Así lo advierte la carta remitida el pasado 22 de julio por la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf) y divulgada hoy por la Fedefut.
El caso se inició por la suspensión el pasado mes de junio de los futbolistas del conjunto Antigua de Guatemala Alejandro Díaz, Víctor Ayala, José Aroche y Alexander Robinson, a quienes se les detectó el uso de la sustancia SARM S-22 (precursor de la testosterona), prohibida por la Fifa.
La sanción fue emitida por el Comité Disciplinario en Materia de Dopaje -Comité Ad hoc- nombrado por el Comité de Normalización que dirige la Fedefut desde el pasado mes de enero tras el escándalo de corrupción 'FIFAGate', que involucra, entre otros, al expresidente Brayan Jiménez.
El club Antigua GFC pidió en abril a los integrantes del Comité de Normalización que anulasen los procedimientos de control de dopaje a sus cuatro jugadores por considerar que existieron 'vicios y anomalías'.
Posteriormente, los jugadores sancionados denunciaron 'a título individual' a los miembros del Comité de Normalización, un proceso que fue admitido a trámite por el Tribunal de Honor de la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (Cdad), el máximo órgano del deporte federado en el país.
Este organismo fijó una audiencia sobre el caso para el próximo 2 de agosto, informó la Fedefut.
Ante esta situación, la Concacaf remitió una carta a la Fedefut en la que advierte de que si se confirman las injerencias de los miembros del Comité en este proceso se podría suspender a la Fedefut, lo que impediría la participación de la selección y de los clubes.
'Lamentamos que la Federación Nacional de Fútbol de Guatemala se encuentre en inminente riesgo de una suspensión por acciones de terceros en contra de miembros del Comité de Normalización de la FIFA en Guatemala', señaló hoy la Fedefut en un comunicado.
