Centroamérica

La trágica muerte de Rommel Fernández, el goleador panameño que enamoró Tenerife

Su carrera en España inició con el Tenerife, donde hasta el día de hoy es recordado

2016-03-05

Rommel Fernández es uno de los ídolos históricos del fútbol panameño, de gran trayectoria en España, supo jugar en Tenerife donde fue ídolo, en Albacete donde todavía lo recuerdan, y el Valencia no tuvo sus mejores años como futbolista, pero fue querido.

Con una estatura de 1.86 cm y un peso de 81 kg, Fernández nacido en el humilde barrio “El Chorrillo”, era un delantero de área, con mucha presencia y gran ubicación, su principal arma era su potente y certero remate de cabeza; gracias a esas características fue apodado en España como el “Panzer”.

Sus primeros pasos en el fútbol fueron en el Plaza Amador, equipo emblemático de Panamá donde llegó con 4 años, luego de un breve paso por el Atlético Panamá pasó al Alianza FC donde devutó en 1986.

Un viaje que le cambió la vida.

En el año de su debut, Fernández realizó un viaje a la isla de Tenerife en España, con un grupo de jóvenes panameños de ascendencia española, para disputar el Mundialito de la Emigración, donde participarían ascendientes de españoles. El técnico panameño lo alineó de forma irregular en aquel certamen como falso oriundo, aprovechando sus apellidos que eran muy comunes en el país ibérico.

Ya en el partido, el ex árbitro tinerfeño Domingo de Dios Palau, se percató rápidamente de las buenas habilidades del centroamericano y su capacidad de anotar, e inmediatamente se lo comunicó al directivo del Tenerife, José Antonio Barrios, quien consiguió que fuera fichado por el equipo con un contrato de filiales. Posteriormente el jugador pasó a formar parte del equipo de primera división.

“Un delantero con mucha potencia, un gran remate de cabeza, con un disparo muy fuerte con la pierna derecha y, sobre todo, con muy buenos movimientos”, así lo describiría años después el directivo que lo contrató, José Antonio Barrios al diario As de España.

Años en España: De ídolo goleador a una terrible desgracia

Su carrera en el Club Deportivo Tenerife fue corta, pero de grandes momentos, sus goles valieron para que en la temporada 1988-1989 el club isleño consiguiera el ascenso a la primera división, en aquella campaña el delantero anotó 19 goles y se ganó el cariño de toda la afición blanquiazul.

En el año 1991 fue fichado por el Valencia FC que pagó 300 millones de pesetas por la ficha del goleador canalero, sin embargo, Fernández no logró adaptarse al equipo ché y tras sus dos goles en 21 partidos fue cedido de manera prematura al Albacete.

Paso fugaz por Albacete, convirtiéndose en un ídolo para siempre

Tras su mal paso por el Valencia, Rommel buscaba volver a sus orígenes goleadores y retomar su nivel de juego. La buena noticia se dio cuando fue cedido al Albacete donde jugó 18 partidos y concretó 7 goles.

Su primer tanto se lo anotó al equipo de sus amores, el Tenerife, en juego por la primera división de España. Posteriormente sufrió un par de lesiones musculares que lo mantuvieron fuera por algunas fechas. Luego volvió y marcó más goles, incluyendo un triplete al Cádiz en la victoria 5-0 del equipo manchego en aquella liga.

Tras su exitoso momento, el delantero se consagró como ídolo de la afición del Albacete en tan solo pocos meses, caracterizado por los aficionados y sus compañeros como una entrañable persona que siempre tenía una sonrisa para dar.

Fernández marcó los lugares donde estuvo como deportista.

Trágico Accidente

“Cuando me enteré de su muerte, entrenando en Granada, fue tan duro el golpe que mi entrenador me mandó a casa”, Quique Medina ex compañero de Rommel.

El 6 de mayo de 1993 tras disfrutar de uno de sus platos favoritos –La paella- el jugador se dirigía en su Toyota Célica, junto a uno de sus primos, cuando en la carretera rumbo a Albacete su auto derrapó y se estrelló contra un árbol muriendo a los 27 años, dejando consternado a todo un país y a tres ciudades que enamoró con sus goles y calidad humana.

De esta forma acaba la vida y la carrera de un excepcional depredador del área que supo ganarse el cariño de todos los clubes donde jugó, en donde todavía lo recuerdan.

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Homenaje en Tenerife por parte de la peña “Frente Blanquiazul”

La principal peña del Tenerife, “Frente Blanquiazul”, realizó un homenaje póstumo al delantero, creando una imagen de cerámica del jugador en las afueras del estadio del club, el Heliodoro Rodríguez López.

En la placa se puede leer: “El Frente Blanquiazul en homenaje al ex jugador panameño del C.D. Tenerife, Rommel Fernández Gutiérrez (15-03-66/ 06-05-93) quien con su humildad y entrega profesional despertó los dormidos sentimientos Tinerfeños.”

Estadio Rommel Fernández

Otro homenaje y no menor, es el que le realizaron en su país natal Panamá, donde el principal estadio que se llamaba “Revolución” empezó a llevar el de Rommel Fernández, luego de la muerte del jugador. En ese inmueble disputa sus encuentros la selección mayor de fútbol.

Frases para el recuerdo

1-“Ni leí el papel. Se trataba de quedarme en España. Firmé y ya está”, Rommel Fernández sobre su contrato con el Tenerife que firmó en una pizzería.

2-“Un delantero con mucha potencia, un gran remate de cabeza, con un disparo muy fuerte con la pierna derecha y, sobre todo, con muy buenos movimientos”, José Antonio Barrios, directivo que lo llevó a Tenerife, años después a diario As.

3-“Enamoró muy pronto tanto a la afición como a nosotros, sus compañeros. Era tosco, duro, en los entrenamientos era un espectáculo. Yo central y él delantero, las chispas saltaban, pero siempre acababan igual, con una sonrisa, la que siempre llevaba en su rostro. Desde el principio, demostró que era una fantástica persona.”, Quique Medina, ex compañero de Rommel.

4-“Yo no voy a ningún sitio, yo me quedo en mi islita, me siento totalmente identificado con todos los chicharreros”, Rommel Fernández sobre los rumores de su traspaso aquellos años.

5-“Fue un momento muy triste en mi vida. Un palo tremendo que nunca olvidaré. Que una persona joven se marche tan pronto siempre te deja muy marcado”, expresó Bjelica, compañero en Tenerife.