Chelato vivió sus últimos meses con su salud muy quebrantada, se había sometido a una intervención quirúrgica en marzo anterior en México en sus cuerdas vocales producto de que no recuperaba la voz tras estar entubado en la Unidad Cuidados Intensivos hace un año en el IHSS cuando los médicos le habían pronosticado solo el 15 por ciento de vida, pero logró resistir.
El minuto a minuto del velatorio y sepelio de Chelato
Siempre fue optimista, pocas veces hablaba del día de su muerte y en sus últimas horas, según relató uno de sus hijos, el periodista Rudy Urbina, Uclés quería entregarle unos libros para que los leyera, él cree que su padre ya presentía su muerte, Rudy no quería seguir con el tema y le dijo que lo hablaran después confiando en que superaría este momento.
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Por su parte Francisco Herrera, gerente de cancha de Olimpia e hijo de Uclés, reveló que el deseo de Chelato Uclés y el cual lo hablaron en una ocasión en familia era que el día de su muerte él quería ser sepultado con un traje color beige que fue el que utilizó siendo entrenador de Honduras en el Mundial de España 82, ese fue el único que deseo que solicitó para cuando muriera.
La familia también decidió colocarle encima de su traje una camisa conmemorativa de las que él vendía en sus últimos años en el parque central de Tegucigalpa.
Chelato es velado en el estadio Nacional y su cuerpo permanecerá todo el día en este recinto donde logró su pase al Mundial de España y donde vivió muchas glorias con Olimpia. Sus restos mortales serán sepultados el viernes a las 8:00 de la mañana en el cementerio Santa Cruz Memorial.