¿Will, aún te llaman “Chechi Boy” los aleros?
Es correcto, es un apodo que se dio cuando estaba en el Olimpia, yo tenía un compañero, Gerson Vásquez, ambos nos llamábamos los “Chechis Boy”, eso pasaba cada vez que nos enviábamos un pase, de ahí surgió.
¿Se mantiene este apodo en San Pedro Sula?
Claro que sí, la mara sabe que yo soy ese y nadie me va a quitar este apodo. Esto es lo más bello, que conservas algo que se hizo famoso, te diré que tengo un primo que sueña con que le llamen el “Chechi Boy”, siempre le digo que la fama no se compra, se busca.
¿Con qué te identificas más, con Wilito o Chechi?
Con “Chechi Boy”, me hace creer que mi interior crece cada día, es un apodo que traigo desde hace muchos años, normalmente los sobrenombres te duran muy poco, luego desaparecen, yo tengo toda una vida con el mío, este es eterno, los demás son recientes. El “Pistolero”, el “Garrobero”, el “Naranjero”, todos estos son de hace poco tiempo, caso contrario con “Chechi Boy”, este es un apodo que tiene historia, un día me agarraron pelando naranjas con un naranjero y me pusieron el “Naranjero”.
¿De dónde sale el apodo del “Pistolero”?
Ese sale después del disparo contra Milton Palacios, ese es un apodo que solo sirvió para recordarme cosas malas, eso no me gusta, porque casi me echo al “Negrón” y eso es algo que me ha marcado.
¿Por qué tendría que marcarte, si fue un balazo pasajero?
Esa vez dijo don Eulogio: “Ese muchacho andaba drogado”. Si hubiera andado drogado le descargo todas las balas de la pistola, vos sabés que las personas drogadas no piensan, solo se jala y después que ha pasado el ajetreo, el efecto de la droga, te preguntas qué has hecho y dónde estás. Y al final estás detrás de los barrotes, hule, te diré que después de ese problema, cuando me quitaron la pistola me querían caer los tres hermanos en vaca.
¿Por qué sacaste la bomba ese día?
Porque nos tocaba despertarnos a las 5:45 de la mañana, a esa hora es cuando yo comienzo a arroparme con la sábana, no me gusta que me levanten a esa hora, un día antes estuve limpiando la bombita (pistola) y me tocó probarla, estábamos en la Granja Delia, en Siguatepeque.
¿Disparaste un día antes?
Sí, claro, la tuve que probar, había un muro ahí de tierra acumulada y muchos árboles y no había casas alrededor, estuve probando la bruta, bum, bum, bum, estaba de toque. No como la pistola del guachi de la sede del España que nunca dispara. ja, ja, ja. Siempre se traba, en una emergencia me lleva pu..., al siguiente día trabajamos en la tarea de gimnasio, mucho hierro encima, llegó un momento que estaba mamado, con las neuronas reventadas y en eso llegó Milton con esa voz rara que se carga y comenzó a vacilarme, le dije desde un principio que no bromeara.
¿Qué fue lo que él te dijo?
Es que en una ocasión, había una chamaca por ahí, que supuestamente yo le gustaba, pero la cipota esa anduvo especulando con algunas cosas que eran mentiras, ella había dicho que al “Chechi Boy” le faltaban pantalones para ser parte de lo que ella quería.
Wilfredo Barahona la pasó espectacular en la entrevista con Limber Pérez.
Claro que era una falta de respeto, no tanto eso, un día que andaba en una noche de camisas mojadas, la delincuente esta le comenzó a decir a un moreno de nombre Fabio, un amigo de Milton, cosas que no eran ciertas, que a mí me faltaba ser hombre. Un día en el entreno Milton dijo: ‘Tengo algo de un compañero’, sentí que el oído me explotaba, porque sabía que era conmigo, entonces, él la tiró. Sentí que me mató, siempre he sido hombre, con eso empezó. Además, esa muchacha era la novia de un compañero y eso me podía causar problemas con él, le dije que no bromeara, eso me encendió.
¿Qué frase usó Milton?
Con su “vozarrón”, dijo que yo era un maricón. Estábamos estirando, el entrenamiento ya iba a terminar, lo que quería era irme a duchar y tomar un buen desayuno, porque el pegue en ese restaurante es muy bueno, recuerdo que Wilmer Velásquez le dijo que no bromeara conmigo, que yo andaba mi pistola, con esa voz medio rara, le dije a Wilmer que le dijera que no bromeara.
¿Entonces, buscaste el liderazgo de Wilmer para que no te fastidiaran?
Sí, claro, es que no andaba de buen humor, Wilmer le dijo que yo andaba armado y que era peligroso, recuerdo que Milton respondió: ‘A quién le va a pegar un tiro este maje’. Y dijo otras palabras que no me gustaron, cuando se calló, me fui a la habitación.
¿Dejaste de entrenar para ir a traer la bomba, creían que era una broma?
Me fui, estábamos muy cerca de mi cabaña, cuando traigo mi bomba y la alisto, ya no veo a Milton, cuando lo busco estaba detrás de Arnold Cruz, solo decía no bromees, no bromees, aquel moreno se hizo pequeño, Arnold estaba más blanco que el papel bond, ja, ja, ja.
¿Pero en dónde tenías la pistola, arriba o abajo?
La tenía apuntando hacia ellos, bala en boca. Soy mal indio, le había dicho que no bromeara. Le hice el bombazo al pie, abajo, no a pegar, solo para intimidarlo y que quede claro que no estoy de bromas, cuando escuchó el disparo.
¿Quién te tranquilizó?
Wilmer me convenció para darle la pistola y me dijo que no me metiera a dificultades, el problema es que cuando ya no tengo la pistola en la mano aparecen los tres hermanos para agarrarme, ahí me salvó Wilmer. Eran perros para “vaquearte”, con el trozo en la mano, nunca me di cuenta en dónde se fueron los demás, pero gracias a Dios que no se dio a más, son anécdotas que me hacen inmortal, porque la gente lo primero que me grita en el estadio es: “Vos, basura, allá esta Milton”. Peor sería que me preguntaran en una cárcel: “Por qué mataste a Milton”.
¿Quedó resuelto todo con Milton?
Me costó. Luego se dieron los dimes y diretes, don Eulogio decía que yo era un drogadicto, no lo dijo en ese tono, pero mencionó que yo andaba drogado, te diré que nunca actué mediante efectos de la droga, fueron cosas de bromas, que siempre hay un día que no quieres bromear. Eso fue lo que me pasó. Luego me suspendieron por tres meses, fue muy complicado, hasta que llegó Sambulá y me pidió de regreso al equipo, la relación con Milton no era buena, él jugaba de central y yo de lateral, un día me pegó un pechugón en el camerino, ‘la próxima vez que no me hagas caso te voy a matar a ver...’, eso me dijo con la voz misteriosa, me le fui al brinco, pero siempre me mantuve sentado, apuesto que él quería que me levantara para sentarme de un bombazo.
“Chechi”, con esa forma de correr en el terreno de juego, tanta energía, hay futbolistas que creen que andás marihuaneado.
No, jamás, quiero decirle a la gente que en ningún momento he usado drogas, a veces la ‘people’ se confunde. El hecho de que me cuide, que duerma bien y que te traten bien en casa, no quiere decir que juego como loco. Le acepto doping antes y después de un partido a cualquiera, les pelaré la cara, no me meto sustancias, esto es natural, la comida que me ha recomendado mi mamá, me ayuda a correr como lo hago.
Wilfredo Barahona recordó cómo le hizo el disparo a Milton Palacios en Siguatepeque.
Huevo de pescado virgen, eso es buenísimo, no sé qué es, pero me dijo que me lo comiera, que iba a levantar mi nivel en todo lo que hiciera. Y las viejas saben mucho de eso, ese huevo de pescado virgen lo consigo por las bandas, la clave de esto es que no me he lesionado de gravedad, me he cuidado en ese aspecto; miras a futbolistas veteranos jugando y no quieren moverse del sitio en donde están, quieren que la pelota les llegue a los pies, y mi posición me permite correr y eso es lo que hago.
Tantos años siendo constante en el fútbol de honduras, ¿Qué pasó que nunca hubo cupo para vos en la selección?
Creo que fue porque siempre malinformaban. Yo en la Federación de Fútbol tengo enemigos, te diré que cuando estuvo Suárez, este señor que se parece a los Simpson, al que le llaman Falero, ese viejo me mató con Suárez. Cuando ese viejo vino acá (al Real España) me di cuenta que era el que me tenía cortado, ya había una mala información de Will Barahona.
¿Pero en dónde te conoció para hablar mal de vos?
Porque hablaba en los medios, la gente siempre me preguntó por qué no estaba en la Selección y les respondía que para que yo fuera convocado tenía que jugar como Messi o Ronaldo. Si sos Wilfredo Barahona, olvídate, no me quedaba de otra que seguir trabajando para el equipo, tanto que hablaba y creí entrar en controversia cuando él llegó acá, me cortó, cuando terminó el torneo yo vine a traer mi finiquito. Estaba cortado, me iba del equipo, pero gracias a que luego ficharon a Mauro Reyes, aún sigo en la Máquina.
Chechi, ¿Con primi no andas con burradas, verdad?
Siempre soy así, nací para ser alegre en esta vida, él me dijo muy claro, me gusta que vos le metás ritmo al equipo, que andés alegre, que la vivas, pero a la hora de los partidos necesito seriedad, no quiero loqueras, te quiero serio en la cancha, si entro a una charla y se me ocurre decir algo, lo hago, él me lo permite, pero la llevo suave.
Tu rol de actor ¿vas para Hollywood?
Es muy difícil, pero estoy a la puerta de reiniciar la filmación de la película ‘El reportero’, basada en la vida real, tengo el papel de sicario, dirijo una fuerte banda de sicarios, malos, ahí no salgo de maricón, eso es en los otros programas que hago.
¿Cuándo piensas retirarte del fútbol?
Yo no me voy a retirar, Dios lo hará, hasta que Él diga que ya es hora, ese día me retiraré, cuando Él vea que estoy robando en me dirá que me retire. Te diré que tendré un programa de televisión, se llamará de “Todo un Poco”, es casi un hecho que se dé el proyecto, será los domingos. Después que la gente esté un poco estresada verá mi programa de televisión. Si Dios me dice que juegue hasta los 70 años, bueno, eso haré.
¿Cuál fue el problema que tuviste con Chelato cuando te tocó correr de Amarateca hasta Tegucigalpa?
Ese fue un problema que tuve con Osman Madrid, yo le ofrecí vergazos, a los dos le ofrecí pijazos. A Chelato le dije que se callara que no era con él. El rollo fue porque Osman llegó a la sede del club, ahí vivíamos todos los jóvenes, y había unas celosías quebradas, él apareció insultando a todos. Que estos hijos de tantas que no cuidan nada, que los voy a mandar a sus pueblos para que sigan aguantando hambre, palabras fuertes, por rato lo entiendo porque camina un poco azucarado. Todo llegó a mi oído y yo vivía ahí, estábamos en el entrenamiento y le dije a Osman que quería platicar con él.
¿Qué le dijiste a Osman? Apuesto que te le asustaste.
Jamás, le pregunté que cómo era esa mierda que andaba diciendo que nos iba a mandar a tal lado a aguantar hambre, me respondió maleado, pero le dije me bajara ese tono que no era su payaso, Chelato se quiso meter y le dije que se callara que no era con él, se enojó mucho por haberlo callado, entonces le dije que no podíamos aguantar más hambre en otro lugar, con lo que nos pagas es suficiente para morirnos de hambre, pasó la discusión y Osman dijo que yo estaba fuera del equipo, me voy a la mierda, le dije, quién quiere estar acá y me fui corriendo para Tegucigalpa.
¿Si se quedaba falero en la máquina, estuvieras en EUA seguramente?
O en mi pueblo, pero no le iba a dar ese gusto a ese cabrón, de todos los entrenadores que yo he tenido, al único que le han regalado el título de técnico es a Falero, es un técnico de fútbol que no sabe nada. en el país le dan chamba a cualquiera”
LO DIJO BARAHONA:
Osman Madrid le pidió a Óscar “Cocli” Salgado que me sacara de la Selección Sub-20 solo porque no le quería firmar el contrato en Olimpia'.
