Liga Nacional

Olvin, el futbolista hondureño que juega sin manos

Tras perder sus extremidades en 2001 en un accidente, ahora se gana la vida pintando y vistiendo la camisa del Liverpool de La Ceiba

2015-09-04

Olvin Cruz es un ejemplo de superación, disfruta jugando fútbol y pintando cuadros de arte pese a haber perdido las extremidades superiores producto de un accidente en México cuando trabajaba en la construcción.

Olvin nació el 11 de abril de 1981, tiene 34 años de edad, está casado con Reyna Urbizo, con la que procreó un hijo de nombre Matheu Cruz, además presume una licenciatura de arte en diseño gráfico y apuesta por una maestría.

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Posted by Diario Deportivo Diez on Viernes, 4 de septiembre de 2015

FOTOS: ASÍ JUEGA OLVIN EN EL LIVERPOOL DE LA CEIBA

“En 2001 trabajaba en la construcción en México y pegué en un cable de alta tensión con una varilla, me quería ir de mojado a Estados Unidos, pero me quedé dos años trabajando en el país azteca, ahí fue el accidente que terminó amputándome las manos”, relató.

Foto: Diez

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“Al principio me incomodaba todo, no podía hacer nada y dependía de mi familia, luego me acostumbré y ahora hago de todo: dibujo, pinto, juego fútbol... Después de perder las manos aprendí a hacer muchas cosas que antes no podía”, reiteró.


Al consultarle sobre su mayor dificultad en su rutina diaria, expresó: “Lo que más me cuesta es ponerme un par de calcetines, pero no tengo problemas porque no uso, la verdad es que soy muy independiente, me cambio solo, hago todas mis cosas, trato de no molestar a nadie para que me ayuden con algo, lo importante es que aprendo rápido”.

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PERSEVERANTE
Olvin confiesa que no acostumbra a darse por vencido y a pesar de las adversidades logró terminar sus estudios secundarios y universitarios. También tiene como meta instalar un programa en internet para exponer sus obras.

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Y añade: “Antes de perder las manos solo había terminado la escuela, después del accidente comencé a estudiar en el colegio y la universidad, siempre que inicio algo me gusta terminar, por eso me gradué de artes gráficas”.


“Me gano la vida en diseño gráfico libre, trabajo pintando, vendo bastantes cuadros, estoy desarrollando un proyecto de galería en línea que quiero poner. El precio de mis obras oscilan entre 3 mil y 10 mil lempiras, cuando van para el extranjero cuestan un poco más”, comentó.

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RETRATA A PERSONAJES
Durante 14 años ha pintado muchos cuadros, pero nunca se imaginó obsequiarle uno al expresidente de Estados Unidos Bill Clinton y al médico Robert Rey, conductor del programa “DR 90210”, que se transmite en varias compañías de cable norteamericanas.


“Tuve el honor de obsequiarle un cuadro al expresidente de Estados Unidos Bill Clinton, en una conferencia le hice un retrato cuando vino a Tegucigalpa, estaba muy feliz y se fue agradecido, al que sí le cobré fue al doctor Robert Rey del programa ‘DR. 90210’, también le he vendido a varios empresarios”, afirmó.


Tengo como objetivo sacar una maestría en arte, quiero llegar a lo más alto posible, la pintura es una especie de terapia que me ha salvado la vida, al principio estaba deprimido, creía que no iba a seguir viviendo”.

EL FúTBOL, SU OTRA PASIÓN
Es común ver a Olvin los fines de semana enfundado en el uniforme azul profundo de su equipo Liverpool, afiliado a la Liga Siete Colonias. Recientemente anotó su primer gol de la temporada ante el equipo Mercadito Lizzy, pero su máximo sueño es conocer a los futbolistas Noel Valladares, Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.

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“Desde niño jugaba fútbol, salía de la escuela y me iba a las canchas, pero cuando perdí las manos pensé que nunca más iba a volver a jugar porque creía que el equilibrio me iba a afectar. Un vecino me dio ánimos al decirme que el fútbol se juega con los pies y la cabeza. Cuando tenía las manos era defensa y cuando las perdí me hice delantero”, explicó.

Foto: Diez

Orlin sabe que difícilmente será un atleta de alto nivel competitivo, sin embargo, este joven se alegra, pues tiene el amor de su esposa y su hijo, quienes son su mayor inspiración.


“Me gustaría conocer a Noel del Olimpia y a Messi y Cristiano”, nos dice y remata la historia contándonos que se crió junto a los jugadores de Motagua y Olimpia, Wilmer Crisanto y Arnold Peralta, en la colonia Herrera.