Repasá la tabla de posiciones de la Liga Española
El conjunto merengue, con más horas de descanso tras el desgaste europeo, apostaba por imprimir un ritmo alto de juego desde el inicio, con una apuesta clara de Zinedine Zidane por extremos y la busca de superioridad en bandas con subidas de laterales o la libertad de movimiento de Bale.
El Real Madrid corría, le metía velocidad a la posesión, cosía a saques de esquina a su rival y se topaba con una figura que emergía por encima del resto. Oblak era un muro insuperable.
En un ritmo frenético de ataques madridistas no podía faltar la polémica que siempre acompaña un derbi. Kroos pedía penalti ante Juanfran y Asensio rozaba la escuadra y el gol.
Cristiano Ronaldo festejando su tanto ante el Atlético.
Marcelo aumentó la velocidad y su intento lo frenó la madera, la misma cruceta, antes de que Oblak cerrase su exhibición con una gran parada al potente disparo de Carvajal.
El plan de Zidane estaba al descubierto y Simeone ajustó piezas en el descanso. El Atlético arrancó el segundo acto en su terreno, pero cómodo, tapando salvo en una acción que le costó cara las zonas de ataque madridistas.
Griezmann marca a Cristiano Ronaldo en el Derbi de Madrid.
Qué risa: Los divertidos memes que dejó el empate en el Derbi de Madrid
El gol hizo sentir tener los deberes hechos al Real Madrid. Se desconectó de golpe y el Atlético dio un paso firme al frente.
Vitolo, que no encontró su papel en el primer tiempo, hizo daño a la espalda de Marcelo. Keylor salvaba la primera al balón picado de Saúl, respondía en la segunda abajo ante Vitolo pero en su rechace nada podía hacer para que Griezmann marcase a placer.
Los jugadores del Atlético celebrando el gol de Griezmann frente al Real Madrid.
Saúl, con tiempo para pensar y metros para correr, frenó y chutó ajustado al palo. Los intentos madridistas tras remate de cabeza cruzado de Bale y disparo de Modric, no podían acabar de otra manera que ante una parada brillante de Oblak.
En el 90+1, Oblak voló a la falta a la escuadra de Ramos, que en su cabeza tuvo, como en el añadido, el balón del triunfo. Nada pudo mover un empate con el que gana el Barcelona.