El conjunto de Philip Cocu recuperó la autoridad de la competición holandesa que el pasado año cedió al Feyenoord y que se le resiste al Ajax desde el 2014.
Esto, ha generado tremendo escándalo, pues los hinchas del Ajax se salieron de control tras el nuevo fracaso.
Los ultras de dicho club esperaron al autobús donde viajaba toda la escuadra y en cuanto vieron que se acercaba, decidieron bloquear su paso y comenzaron a golpearlo para que los jugadores bajaran a dar la cara.
En cuanto los futbolistas fueron descendiendo poco a poco, los aficionados aprovecharon para reclamar de una forma agresiva la derrota.
No había ningún elemento de seguridad que puediera detener el hecho, pero minutos después se hicieron presentes.