Pablo Pérez y su dramático relato tras los fuertes ataques en el Monumental
''Me entristecen los acontecimientos de ayer que llevaron al aplazamiento de la final de la Copa Libertadores de la Conmebol. La violencia no tiene cabida en el fútbol y la seguridad y el bienestar de los jugadores, espectadores y oficiales siempre deben ser la primera prioridad'', comenzó diciendo el máximo dirigente de la FIFA.
Infantino dice que brinda su total apoyo a la ''última decisión de posponer el juego'' y confía ''plenamente en la Conmebol, tanto los clubes como las autoridades locales para tomar las decisiones correctas en el futuro''.
''Sin embargo, debido a los desafortunados rumores falsos que se están difundiendo, me gustaría aclarar que no pedí en ningún momento que se jugara el partido, ni que amenazase a nadie con medidas disciplinarias si el juego no se llevaba a cabo, simplemente porque cualquier decisión relacionada con este partido es responsabilidad exclusiva de Conmebol y no de FIFA'', confesó.
Cabe recordar que Infantino asistió el pasado sábado al Monumental donde ocurrieron los fuertes incidentes contra el bus de Boca. Los jugadores revelaron que los estaban obligando a disputar la final a pesar de que tenían a su capitán Pablo Pérez y a otros jugadores en el hospital.