El asesinato se produjo tres días después de un ataque a la embajada estadounidense en Bagdad por parte de partidarios de Hashd al Shaabi, en protesta por un atentado estadounidense contra bases de la facción proiraní más radical de esa milicia.
Desde entonces, el conflicto entre Irán y Estados Unidos parece que no tiene fin. El temor a una guerra es a nivel mundial.
Ahora, esto ha provocado las primeras consecuencias en el mundo del fútbol. Y es que un jugador del Ajax de Holanda, ha decidido abandonar al equipo por temor a lo que está sucediendo entre Estados Unidos e Irán.
Sergiño Dest, es un futbolista de Países Bajos, pero que tiene ascendencia estadounidense. Apenas tiene 19 años de edad.
El Ajax se encuentra en estos momentos en una mini-pretemporada en Catar, tras el parón por las fiestas navideñas.
Sergiño Dest ha pedido a su equipo abandonar la concentración debido a la inseguridad que hay en Oriente Medio por el conflicto que ha estallado recientemente entre EE.UU. e Irán.
COMUNICADO DEL AJAX
El futbolista Sergiño Dest, posee doble nacionalidad, holandesa y estadounidense, ya que su padre es norteamericano y él nació en Almeres (Países Bajos).
Esto ha provocado que el jugador estuviera bajo amenaza. Y es que la situación en la zona es muy delicada tras la ofensiva iraní contra bases de EE.UU. en Irak.
El Ajax ha emitido un comunicado oficial donde muestran su apoyo al jugador, entendiendo la decisión que ha tomado ante la incertidumbre que gira en torno a la crisis entre ambos países. Se ha regresado a Amsterdam.
Mientras el equipo de Ten Haag sigue en Catar, Dest se ejercitará con el filial del conjunto holandés, el Ajax Young.
EL CONFLICTO SIGUE
El pasado miércoles de madrugada, Irán lanzó una tanda de misiles contra bases iraquíes utilizadas por tropas estadounidenses y de otros países miembros de la coalición internacional antiyihadistas.El líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei, indicó que los bombardeos fueron una 'bofetada' para Estados Unidos y que la venganza por el asesinato de Soleimani todavía estaba por llegar.
El ejército iraquí anunció que no se registraron bajas, mientras que Trump señaló la primera evaluación de daños y víctimas indicaba que 'hasta ahora, todo bien'.
