Desde entonces se abrió una investigación sobre las causas de la muerte del exjugador argentino, pues mucho se habló del mal cuidado que se le estaba dando a Maradona.
El doctor Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov, fueron los primeros en ser investigados por homicidio culposo por las autoridades de Argentina.
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Ahora, salen a la luz tres nuevos imputados por la muerte de Maradona, se trata del psicólogo Carlos Díaz y a los enfermeros Ricardo Almirón y la Dahiana Gisela Madrid.
En el caso de Carlos Díaz, había asumido el tratamiento de Maradona en septiembre de 2020 y era mirado de reojo por Luque y Cosachov por el rol preponderante que había alcanzado, el cual también es considerado por los fiscales.
Por su parte, Dahiana Madrid declaró algo diferente cuando la citó la Justicia que en el informe que le presentó a la empresa que la empleaba. 'Escribí en el reporte que le intenté controlar signos vitales, lo cual no es cierto. Lo puse por una indicación del coordinador', admitió después.
El enfermero Ricardo Almirón, en tanto, es el último en haber visto con vida a Maradona, antes de que lo relevara su compañera.
OTRA VEZ CITADA
Además, volverá a ser citada a declarar, aunque como testigo, la cocinera conocida como Monona (de nombre Romina Milagros Rodríguez), quien se encontraba en la casa en el momento en el que Diego fue hallado sin vida.En las últimas semanas, diversos testimonios revelados por Infobae, extraídos de los peritajes a los más de 400 gigabytes de audios, archivos y chats extraídos de los aparatos del neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov que son parte de la causa que investiga el posible homicidio culposo de Diego Armando Maradona, revelaron que la marihuana circulaba en ciertos miembros de su entorno y que el máximo ídolo del fútbol la consumía, que la pedía.
