'No trabajo en el Comité. Es una decisión del Comité, sólo pienso en mi equipo, en cómo entrenamos y cómo nos vamos a enfrentar al Atlético el miércoles. De otro equipo no me gusta hablar. No me gusta que hablen de nosotros, por eso yo no hablo de ellos', zanjó Neymar.
En opinión del brasileño, todos los jugadores, 'principalmente los atacantes', están sometidos 'a sufrir intimidaciones'. 'A veces no lo aguantamos y enloquecemos. Es negativo para nosotros, no debemos hacerlo, y hay que castigarlo', advirtió.
'Muchas veces no sabemos lo que pasa en una provocación, como le pasó con Zidane o a otros jugadores, pero no puedes caer en la provocación del adversario. Tengo que trabajar con la mente. Desconozco cuántos partidos serán, no quiero hablar sobre el tema. Es difícil estar en un campo en el que se provoca sin parar, nadie tiene sangre fría para aguantar esto', añadió al respecto.
Sobre su compatriota Lucas Silva, nuevo fichaje del Real Madrid, Neymar le califició de 'gran jugador'. 'Es una de las nuevas realidades del fútbol brasileño. Le deseo toda la suerte del mundo, que sea feliz, pero no contra el Barcelona', sentenció entre risas.