Uno de ello es el caso de Eduard Strelstov, un jugador con clase suficiente para asombrar a todos y que fue llamado el 'Pelé blanco' de la Unión Soviética, prometía capítulos legendarios en las Copas del Mundo, sin embargo, nunca se llegaron a escribir.
SU HISTORIA
Eduard Anatolyevich Streltsov nació el 21 de julio de 1937 en Perovo, un suburbio de Moscú. Su padre, Anatoly, era un carpintero que se vio forzado a participar en la Segunda Guerra Mundial y tras esto decidió rehacer su vida solo en Kiev.
Así, Streltsov se crió con su madre en una precaria situación por lo que se vio obligado a dejar la escuela y comenzar a trabajar junto a ella en una fábrica metalúrgica.
Las duras jornadas de trabajo no hicieron que Eduard dejara de lado su pasión, que más bien, era su vehículo de escape de la realidad.
'Siempre que tenía un espacio libre entre mis turnos de trabajo, jugaba. El fútbol era ese rayo de luz en medio de toda oscuridad', dijo Streltsov en su momento.
La empresa donde trabajaba tenía un equipo de fútbol y un día el joven llegó a un entrenamiento y sorprendió a propios y extraños. Rápidamente lo integraron al equipo.
DE TRABAJADOR A JUGADOR PROFESIONAL
La compañía organizó un amistoso con el reconocido Torpedo de Moscú, Eduard jugó un gran partido y estos quedaron encantados con su talento que lo terminaron fichando.
Con 16 años, Streltsov debutó con el Torpedo durante la temporada de 1954, jugó todos los partidos y marcó cuatro golpes. Pero en la siguiente campaña sumaría la cifra de 14 dianas en 22 encuentros y el equipo terminó en la cuarta posición.
En 1955 fue seleccionado para el equipo nacional soviético. Su debut se produjo en un amistoso ante Suecia en Estocolmo y anotó un hat-trick en los primeros 45 minutos, su equipo ganó 6-0.
En su segunda aparición con su selección, se volvió a despachar un triplete ante la India en amistoso.
JUEGOS OLÍMPICOS DE MELBOURNE
Fue convocado por la Unión Soviética para los Juegos Olímpicos de Melbourne, Australia y donde compartió con Lev Yashin la 'Araña Negra'.
Anotó en el primer partido frente a la Alemania Unificada. En los cuartos de final le hizo doblete a Indonesia y en semifinales le convirtió a Bulgaria.
Siendo el mejor del equipo no jugó la final ante Yugoslavia. ¿Por qué? El técnico Gavriil Kachalin tenía la extraña costumbre de alinear en el equipo titular a dos delanteros del mismo club y Valentin Ivanov, su compañero del Torpedo se lesionó antes del juego clave.
Los soviéticos se coronaron campeones. El delantero Nikita Simonyan le ofreció su medalla, pero Streltsov se negó: 'Tranquilo Nikita, ganaré muchos trofeos más adelante', le dijo.
Los dos años siguientes Eduard Steltsov siguió su romance con las redes y fue nominado al Balón de Oro.
COMIENZAN LOS PROBLEMAS POLÍTICOS
En el Kremlin, no obstante, no gustaba que Streltsov jugara en el Torpedo, y querían que lo hiciera o en el CSKA, el equipo del Ejército Rojo, o en el Dynamo, el de la Policía y la KGB.
Al gobierno no le gustaba nada el peinado moderno de Streltsov, ni que fuera tan guapo ni tan popular con las mujeres.
Se rumoreaba que en las veces que el Torpedo o la selección salía de la URSS, Streltsov era el que más se quejaba cuando tocaba regresar a casa y se temía que desertara. Pero en realidad, fue un lío de faldas lo que condenó a Streltsov.
SIETE AÑOS EN PRISIÓN
Eduard tuvo una aventura con Svetlana Furtseva, una muchacha de 16 años que era hija de Ekaterina Furtseva, la primera mujer que accedió al Comité Ejecutivo del Partido Comunista y amiga intima del entonces presidente de la Unión Soviética Nikita Khrushev.
En la fiesta de celebración del Oro conseguido en Australia, Ekaterina se acercó al futbolista y le pidió que se casara con su hija, este se negó y dijo que estaba enamorado y comprometido con otra mujer, todo bien hasta allí.
Pero cuando el festejo estaba terminando, Furtseva escuchó a Streltsov burlarse de su hija: 'Jamás me casaría con ese mono. Preferiría que me ahorquen antes que casarme con esa chica', esto desató un tremendo lío.
En 1958 con 20 años, Eduard Streltsov y todo el país esperaban el Mundial de Suecia, parecía que pronto tendría el mundo a sus pies.
Después de un entrenamiento, el atacante, famoso por sus fiestas, asistió junto a varios compañeros al festejo de un oficial del ejército que acababa de regresar de gira. En la misma había varias chivas invitadas.
Luego de unos vodkas en el cuerpo, Streltsov fue visto saliendo con una joven de 20 años llamada Marina Lebedeva. Al día siguiente fue arrestado por cargos de violación.
El seleccionador intentó ayudarle para que no lo metieran preso, pero las autoridades confirmaron que la orden 'venía de arriba'.
Fue condenado a 12 años en prisión, aunque nunca se comprobó si realmente era culpable.
Le hicieron firmar una confesión con la promesa de que le permitirían disputar la Copa del Mundo, pero eso no se cumplió.
La URSS llegó a cuartos de final en el Mundial de Suecia y fueron eliminados por el anfitrión.
SALE DE LA CÁRCEL Y NO JUEGA EN INGLATERRA 66
Terminó cumpliendo siete años de condena y al salir ya no era el mismo jugador. Se veía más lento, no estaba en forma y tenía problemas en los riñones.
Siberia lo hizo callar sobre aquel asunto, pero regresó a las canchas con el Torpedo. Volvió a ser campeón, a anotar goles, tantos que, a pesar del encierro, se convirtió en el cuarto máximo anotador en la historia del fútbol soviético.
SU RETIRO Y MUERTE
Se retiró en 1970 e intentó ser entrenador. Murió de cáncer a un día de cumplir los 53 años, el 22 de julio de 1990, un año y cinco meses antes de la desintegración de la Unión Soviética.
En las afueras del estadio que lleva su nombre y en donde juega el Torpedo de Moscú está una estatua de bronce en su honor.
La FIFA lo incluyó en la lista de
