Es que a sus 21 años, el delantero Harry Kane ha marcado 19 goles en la Premier League con el Tottenham, está empatado nada menos que con Diego Costa. Sin embargo, no todo ha sido color de rosa para el rubio. Tuvo que hacer fila.
No jugaba. Después solo participaba en Europa League. Marcó goles. El argentino Mauricio Pocchettino se vio obligado a ponerle en Premier. Siguió anotando goles de todos los colores. Despierta fascinación entre público propio y extraño, es internacional, debutó y marcó, e incluso, pese a su juventud, ha sido capitán de los Spurs. Ahora mismo es una estrella porque él se lo ha ganado, a pesar de que cuando juega no le vemos nada fuera de lo común, ni quien le ha seguido toda la vida, ni por televisión ni desde el estadio.
SU CRECIMIENTO
Es una estrella en el mejor momento para serlo: cuando aún no ha habido ningún retroceso, siempre ha ido a más. Desde el aparecimiento de Wayne Rooney, ningún jugador había causado tantas expectativas como al atacante de los Spurs.
El “HurriKane” creció admirando a Teddy Sheringham y al Tottenham. Jugaba con un equipo local llamado los Ridgeway Rovers -donde también inició David Beckham- cuando, a sus ocho años de edad, fue descubierto por un visor del Arsenal.
En la academia de los Gunners entrenó incluso como portero, lo que fuera por ganarse un lugar, así era de obstinado. Sin embargo, el gusto solo le duró un año. Sus amados Spurs le abrieron las puertas solo para dejarlo ir; el Watford lo ‘cobijó’ y le dio la oportunidad de marcar dos de los goles más importantes de su carrera. Así lo recuerda.
Tenía 11 años cuando, en un partido de práctica, Kane le marcó dos anotaciones al Tottenham. El club londinense se dio cuenta de que había cometido un error al despedirlo y lo reclutó de nueva cuenta.
El joven Harry no convencía del todo a sus entrenadores. No era rápido; sin embargo, tenía buena técnica y un inquebrantable deseo por siempre mejorar. Fue cedido en cuatro ocasiones a Leyton Orient, Millwall, Norwich y Leicester, antes de ganarse una oportunidad en el primer equipo, con Tim Sherwood.
La llegada de Pochettino al banquillo, ha significado su despegue. Él tendrá que demostrar si es una feliz racha, pero pasajera o si se convierte en la nueva estrella de Inglaterra, esa que esperaban. Si es así, el Tottenham tiene muchos millones en el huracán.
Nombre: Harry Edward Kane
Apodo: “Hurrikane”
Nacimiento: 28 de julio de 1993 Lugar: Chingford, Inglaterra
Peso: 65 kilos
Estatura: 1.80 metros
Debut: 2011
Posoción: Delantero
Club: Tottenham
Camisola: 18
Trayectoria:
Militó cedido en: Leyton Orient, Millwall , Norwich City y Leicester City. En 2013 regresó al Tottenham Hotspur.
Sus condiciones:
Técnica: Su poderoso físico no limita para nada su capacidad técnica y esto es de agradecer. Así, el mediapunta del Tottenham exhibe un notable regate y es difícil detenerle en movimiento.
Arriba: Es especialmente bueno con la testa, algo en parte motivado por su elevada estatura (1.83 metros) y fuerte complexión corporal.
Versátil: Polivalente posicionalmente, puede ubicarse en cualquier lugar en tres cuartos de campo e incluso ocupar zona de referencia.
Oportuno: Como los buenos arietes, oportunista, se coloca de manera inteligente en búsqueda del rechace y define con clase en el mano a mano.
Su debut con Inglaterra fue ante Lituania en la victoria 4 a 0 de local. La curiosidad del encuentro es que Kane, se estrenó y a los 80 segundos de haber ingresado marcó su primer gol con la camiseta inglesa.
Es un futbolista de proceso, pues ha sido internacional con la selección inglesa en categoría Sub-17, Sub-19, Sub-20 y Sub-21. Jugó la Copa Mundial de Fútbol Sub-20 de 2013 donde participó en tres partidos y anoto un gol, el cual se lo hizo a Chile.
