En un lapso de apenas cinco horas, Estados Unidos vio desaparecer la oportunidad de clasificar directo a los Juegos Olímpicos de Rio-2016, tras caer contra Honduras 2-0 en la semifinal preolímpica jugada en Sandy, y perder más tarde en Pasadena por 3-2 ante México, en la definición del representante de la Concacaf a la Copa Confederaciones de Rusia-2017.
Klinsmann, con contrato hasta 2018 como Director Técnico de todas las selecciones de Estados Unidos, se encuentra en la mira al fracasar en dos objetivos primordiales para el desarrollo del fútbol estadounidense.
Primero fue el tortazo que la Honduras del entrenador colombiano José Luis Pinto le propinó al seleccionado Sub-23 de las barras y las estrellas, en un partido que estaba diseñado para favorecer a los estadounidenses, según palabras del propio Pinto.
'Hicieron todo lo posible por dificultarnos la vida. El hotel de la concentración estaba demasiado lejos, cuando el de Estados Unidos se encontraba frente al estadio. No sé, cosas que pasaron...', dijo Pinto en declaraciones a la radio ESPN.
De hecho, el encuentro comenzó con casi 40 minutos de atraso porque el autobus de Honduras se complicó en el tráfico camino al estadio.
La selección catracha, con doblete del delantero Albert Elis, definió un tenso encuentro que terminó con la expulsión del técnico de Estados Unidos, el austríaco Andreas Herzog, y del asistente de Honduras, Carlos Tábora.
Ahora, Estados Unidos tendrá que jugar por el tercer puesto con Canadá, que perdió la segunda semifinal ante el campeón vigente México.
El ganador del duelo entre norteamericanos irá a una repesca ante Colombia, a disputarse el próximo marzo, por otro cupo olímpico.
POCO TIEMPO PARA CAMBIAR
Klinsmann trató de poner buena cara en un día negro para el fútbol estadounidense, y reconoció que es necesario ajustar planes con vistas a las eliminatorias mundialistas a punto de comenzar.
'Tenemos que sentarnos a discutir las cosas, con qué estamos contando, cómo queremos construir el equipo hacia el próximo par de juegos. Y no hay mucho tiempo porque las eliminatorias mundialistas están justo delante de nosotros', confesó el alemán.
México desnudó las carencias del fútbol del seleccionado de Klinsmann: irregular posición del balón, una defensa desarticulada y pocas variantes tácticas durante el partido.
Más que nunca, Estados Unidos necesitó en Pasadena a su 'Capitán América', el goleador histórico Landon Donovan, retirado del equipo a causa de sus desavenencias con Klinsmann.
El estratega alemán restó importancia al pedido de Donovan que debería ser despedido si perdía contra México.
'Como he dicho antes, todo el mundo puede expresar su opinión', dijo Klinsmann.
'Y si todo el mundo no te quiere, eso está bien. No estoy aquí para caer bien, estoy tratando de hacer un buen trabajo y tengo el privilegio de tener ese papel', aseguró.
Por lo pronto, movió fichas para su partido amistoso del martes contra Costa Rica, en preparación a las eliminatorias de Rusia-2018, llamando a cinco jóvenes figuras, en sustitución del grueso de sus veteranos mundialistas como Clint Dempsey, Michael Bradley y DaMarcus Beasley.
Dempsey, Bradley y Beasley son de la misma generación que Donovan, a quien Klinsmann descartó por su edad y rendimiento.
Empero, aseguró que no piensa deshacerse de ninguno de sus veteranos.
'No hay ninguna razón para cortar el cordón con ninguno de estos chicos. No es necesario', dijo Klinsmann, dando a entender sin embargo, que le daría más oportunidades a a los jugadores emergentes.
