Internacionales

Aficionado del Barcelona denuncia a Figo por agresión

Según diario Sport, el incidente ocurrió en una disco de Berlín el viernes por la noche.

2015-06-06

El ex futbolista Luis Figo viajó a Berlín para la final de la Champions League y este sábado un aficionado del Barcelona denunció que víctima de agresión por parte del portugués.

Según informa el diario Sport de España, Marc de 29 años se encontraba en la discoteca Le Petit Felix ubicada en el centro de la capital alemana cuando se enteró que el luso se encontraba en un reservado y se dirigió a él para pedirle una fotografía.

El seguidor azulgrana iba vestido con la camisa polo del club, se acercó y le habló a Figo para que se acercara y relata lo que ocurrió después.

Le hice con las manos como si tirara una foto para que me entendiera”, explicó Marc.

Figo se acercó a la valla que separaba la zona vip del resto de los clientes de la discoteca y se encontró con que Marc le dio un beso al escudo de la camiseta. Figo, sorprendido, le cambió el semblante de golpe y le tiró encima todo el líquido que tenía en las manos.

Marc no salía de su asombro cuando vio como el portugués, quien lejos de contentarse con su gesto, se acercó más al aficionado azulgrana, tomó una botella del alcohol y hacía el gesto de rompérsela sobre la cabeza, según cuenta el propio aficionado al rotativo.

Unos amigos de Figo se percataron del momento violento que se gestaba y se acercaron a Figo para retenerle. El exjugador del Barcelona, preso de la ira, luchaba con los suyos para acercarse más a Marc y le propinó un puñetazo con la otra mano, le giró la cara con el golpe y le hizo caer las gafas en el suelo de la discoteca.

Fue entonces cuando intervinieron los servicios de seguridad de la discoteca para alejar aún más a Figo.

Al mismo tiempo, también se acercaron los compañeros de Marc para ayudarle. Luego el portugués, desde la distancia, seguía dando besos a Marc y a sus amigos en señal de desprecio. “Me agredió, no me lo esperaba porque yo solo le di un beso al escudo. Y él perdió los nervios”, explica Marc.