Buena parte de las esperanzas 'gunner' residen en una estadística que viene agitándose por Inglaterra con orgullo. El extraordinario meta checo, campeón de Europa en 2012 con un Chelsea en el que también ganó cuatro ligas y cuatro FA Cup, nunca encajó un gol de Messi en sus seis enfrentamientos. Todos ellos, defendiendo la meta 'blue'.
Es el portero ante el que más minutos (474) ha jugado Messi sin lograr marcarle jamás.
Mañana, su peor pesadilla: Cech es el portero ante el q más minutos (474) ha jugado Messi sin lograr marcarle jamás. pic.twitter.com/yULu8CrJWF
— MisterChip (Alexis) (@2010MisterChip) febrero 22, 2016
'Si marca y nosotros pasamos de ronda, tampoco sería muy importante. Incluso si logra un 'hat trick'', dice quitándole importancia al asunto Cech, cuyo nivel, a punto de cumplir 34 años, lejos de menguar tal y como pensaba Mourinho, ha crecido desde que fichó el pasado verano por el Arsenal a cambio de 15 millones de euros y tras 11 años en Stamford Bridge.
Si acaso, el peor recuerdo que guarda Messi de sus enfrentamientos con Cech es el del 24 de abril de 2012 (2-2), cuando el Barcelona de Guardiola, que se avanzó con un 2-0 y que jugó con un hombre más durante 45 minutos, cayó eliminado de la Champions a manos del Chelsea de Di Matteo.
El delantero argentino se estrelló dos veces con el palo, una de ellas tras el lanzamiento de un penalti y otra tras ayuda de Cech.
Aquella noche, nadie fue capaz de controlar las lágrimas de Messi en el vestuario en una eliminación tan traumática como milagrosa.
En el partido de ida de aquel cruce de semifinales de Champions de 2012 (1-0), en el que el Barcelona ya se había empotrado contra el muro defensivo 'blue', Messi sólo fue capaz de tirar tres veces, sólo uno de ellos detenido por Cech.
Mejor recuerdo guarda Messi de su visita a Stamford Bridge del 6 de mayo de 2009 (1-1), cuando, pese a no marcar, asistió a Iniesta para que lograra en el minuto 93 uno de los goles de su vida, el que llevó al Barcelona a la final de Roma.
En la ida (0-0), 'La Pulga' fue incapaz de batir a un Cech que salía con la puerta a cero del Camp Nou tras 22 partidos en los que los azulgrana siempre se habían apuntado al menos un gol.
El 22 de febrero de 2006 (1-2), Messi, a sus 18 años, protagonizó sobre la arena vertida por Mourinho en Stamford Bridge una de sus primeras clases magistrales.
No superó a Cech (tiró un balón al larguero), pero resultó incontrolable para un Asier del Horno que, no sólo acabaría expulsado, sino que acabaría desterrado del fútbol de élite. En el partido de vuelta (1-1) de aquellos octavos de la Champions, no superar a Cech sería el menor de los males para el argentino. Una rotura de cinco centímetros en el bíceps femoral le dejaría sin plaza en la final de París.
