La Selección

Fabián Coito, un maestro de espíritu formador y paciencia de relojero que dirigirá a Honduras

Trabaja desde 2007 con la selecciones juveniles de Uruguay. Conoce el país, jugó para el Olimpia de 1994 a 1995.

2018-12-17

Un entrenador metódico, paciente y reflexivo, pero al mismo tiempo exigente. Con personalidad para cautivar a los jugadores jóvenes y transmitirles con pasión sus conceptos. Así es Fabián Coito Machado, el técnico se acaba de desvincular de la selección Sub-20 de Uruguay y que será presentado por Honduras en los próximos días.

Coito, de 51 años, está vinculado a la Asociación Uruguaya de Fútbol desde el 2007.Ha dirigido las selecciones juveniles charrúas desde la Sub-15 hasta la Sub-20. Consiguió dos títulos en poco más de una década y nunca se fue de una competencia antes de los cuartos de final (a excepción de la Copa Mundial Sub-17 de 2013 donde quedó en octavos).

Foto: Diez

Con espíritu formador y paciencia de relojero se encargó de formar a los jóvenes jugadores que destacan por su personalidad dentro del conjunto que manejó por años el 'Maestro' Washington Tabárez.

La tranquilidad, su mejor arma

Los logros deportivos no son solo lo que puede ofrecer Coito en su currículum, sino también los que tienen que ver con la construcción del futbolista.

'Nosotros le damos mucha importancia al respeto. Respeto hacia el compañero, hacia los funcionarios, hacia el funcionamiento del grupo, al árbitro, al rival. Y cuando en un futbolista esto no existe, difícilmente podamos mantenerlo dentro de los planteles', aseguraba el originario de Montevideo en entrevista a 'Referí'.

Foto: Diez

Campeón en el Sudamericano Sub-20 en 2017 y en los Juegos Panamericanos sub-22 del 2015, el uruguayo cuenta con un perfil similar al de su colega Tabárez: 'Aprendí a ser tranquilo y también a transmitirlo', reconocía a la prensa oriental.

Aparenta poca pasión y bastante reflexión, características que se pueden ver a simple vista en la personalidad del ex docente de 71 años.

Un exjugador del Olimpia dirigiría a la Bicolor

En 1999 y jugando para Central Español, a Fabián Coito le surgió la posibilidad de comenzar a trabajar en labores de formación de los nuevos prospectos. No quería dejar el fútbol profesional, pero ya comenzaba a comprender que su ciclo dentro del campo de juego, vistiendo de corto, estaba llegando a su fin.

Inició su carrera como jugador en el Montevideo Wandereres en 1982 y defendió esa camisa hasta 1992. Ese año decidió buscar nuevos horizontes y se machó a jugar al San Agustín de Perú.

Un año después, en 1993 militó con Provincial Osorno de Chile y en 1994 arribó al país para jugar con el Olimpia donde estuvo hasta 1995.

Con Central Español consiguió un título en Cuarta y tuvo la posibilidad de dirigir al plantel principal en 2004, pero su aventura fue corta y regresó a la formación de jugadores.

En 2005 dio el salto al Peñarol para demostrar en las juveniles su calidad un escalón más arriba, con otras exigencias y transitar el mismo estilo.

Más de una década formando los nuevos prospectos uruguayos

En el 2007 dio el gran salto al llegar a la Federación de Uruguay. Primero asumió la Sub-15, luego de dos ciclos la Sub-17 donde consiguió el subcampeonato en el Sudamericano y en el Mundial de México en 2011 y, finalmente, el salto al último escalón, el de la Sub-20 y en 2017 se coronó en la categoría en el Sudamericano.

¿Su clave? Es padre y amigo de los jugadores. El que escucha y que también sanciona cuando debe hacerlo.

Ahora Coito busca escalar un peldaño más y asumir el mando de una Selección absoluta. Una oportunidad que le estaría brindando Honduras.