Fabián Coito renueva a la Selección de Honduras y hace debut a cinco jugadores ante Puerto Rico
El choque ante Puerto Rico significó su debut con la elástica de la H después de años de expectativa y anhelo por representar a la Bicolor. Fabián Coito lo ha seguido de cerca y su llamado a la escuadra catracha no fue casualidad.
Su historia en el balompié no ha sido nada fácil y en su momento llegó a pensar que no tendría futuro en la carrera deportiva. El hecho de haber emigrado ilegalmente a Estados Unidos hace muchos años para buscar una mejor vida y ayudar a su familia, imposibilitó que jugara en ese país y desarrollara desde temprana edad su potencial futbolístico.
El trayecto que realizó a la nación norteamericana fue solo con el propósito de solventar las carencias que atravesaba su madre, quien tuvo la ilusión de vivir en suelo estadounidense pero que vio truncado su sueño por la tragedia ocurrida en la 'Bestia Negra', el tren de carga en donde se transportan miles de personas que buscan llegar a la tierra del Tío Sam.
'La gente comenzó a gritar que había que tirarse y lo hacían unos por aquí y otros por allá. Yo intenté bajar, puse mi pierna izquierda en un escalera y en ese momento el tren me jaló, quedé atrapada y me cortó mi pierna derecha', contó doña Iveth Moya, madre del futbolista, en una entrevista con Diez en 2015.
Debido a lo terrible del accidente, la vida de doña Iveth cambió rotundamente. Decidió regresar a Honduras y en su retorno se encontró con la determinación de Bryan de viajar hacia Estados Unidos sin contar con la legalidad para ingresar a esa nación.
La familia de Bryan Moya se regocija de felicidad al ver triunfar al futbolista. Foto: Archivo.
Una oferta del Vida le dio una nueva oportunidad para reiniciar su carrera en el fútbol. No obstante tenía que optar por aguardar por la resolución de sus papeles o regresar a Honduras para proseguir su camino en el balompié.
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¿Por qué tomar la decisión de dejar el Dynamo por el Vida?, se le consultó en su llegada a suelo catracho.
'Más que todo por mi edad, quiero aprovechar el tiempo porque pasa rápido, quiero salir adelante y no solo estar entrenando sin ninguna esperanza de jugar', reveló en esa entrevista.
Sin embargo, Bryan Moya desconocía el brillante futuro que le deparaba por su talento con la pelota y por el hambre de triunfo que corría por sus venas. Eso sí, tuvo que esforzarse muchísimo para destacar entre todos los que tienen la misma aspiración.
'Me siento muy orgullosa por todo lo que mi hijo ha logrado hasta ahora y espero poder verlo pronto jugando como profesional y en la Selección', confesó doña Iveth. Ahora puede sentirse satisfecha porque el primer objetivo está cumplido y lo venidero será solamente ganancia.
