Gerson Rodas ya lo había soñado, se lo imaginó desde antes de que comenzara el partido, pero la realidad fue mucho mejor de lo que el volante hondureño pudo haber imaginado.
Ingresó de cambio en el segundo tiempo por Mario Martínez y en el tiempo extra no anotó un gol, sino dos, el último el decisivo, el que hoy nos tiene en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
'Estoy muy agradecido con Dios por la oportunidad que me ha dado de entrar de cambio. Esto no sólo es mío, sino que de todo el grupo que se lo merece, la verdad”, dijo el gran héroe de Honduras.
'Me imaginé entrar y anotar un gol. Estaba platicando ayer con los compañeros contándoles que yo iba a entrar y a meter un gol, gracias a Dios se me dieron dos. Lloré cuando terminó el partido. Hay que disfrutarlo porque estamos en Londres”.
A pesar del doblete y los calificativos de los medios y la afición, Rodas asegura que no solo él es héroe. 'Todo esto lo hace Dios, él me mandó a hacer los goles. No sólo yo soy el héroe, hay 20 jugadores acá y todos son espectaculares. Algunos no tienen la posibilidad de jugar, pero dan todo el apoyo afuera del campo. Este equipo está para grandes cosas”.
