“El clima es impresionante, no pensé que estuviera así”, comentó el seleccionado, quien tuvo la oportunidad de disfrutar de la comida típica de catracha y saludar a los aficionados.
Su día comenzó en la sala de redacción de DIEZ donde le contestó a los aficionados en un videochat en el que confesó: “Ese día que salí en DIEZ puedo decir que me cambió la vida, desde ahí todo fue diferente. Intenté contactar antes a la Federación, pero no se podía, pero después de salir me cambió la vida”, dijo el jugador de padre hondureño, nacido en Málaga, España, quien se dio a conocer por aquí aquel 1 de abril del año pasado cuando jugaba en Portugal.
Desde que llegó a San Pedro Sula, Jona solo había salido del hotel al entrenamiento en el estadio Olímpico, pero ayer conoció una parte de la ciudad y pudo encontrarse con sus raíces y el inmenso calor.
Su primera impresión fue que le llamó la atención la calidez de la gente. Hicimos un recorrido y visitamos el Mercado Guamilito, allí pudo disfrutar de una rica sopa de frijoles con chicharrón, además del tapado olanchano.
“No había comido esto en España, aunque mi familia hace comida hondureña, pero no me dicen como se llama”, decía Jona mientras saboreaba los platillos.
Mejía ha sido muy claro, ha venido a la Selección para obtener un puesto, sabe que la tiene complicada y quiere ganarse el corazón de los catrachos: “Jugar con Honduras es lo máximo, espero cumplir con todas las expectativas”, contó el delantero, quien milita en el Cádiz de la Segunda B de España.
Durante su recorrido, el jugador apreció la artesanía local. Muchos aficionados se acercaron para saludarlo y le pedían goles.
“Queremos celebrar sus goles con Honduras, la Selección es todo lo que tenemos aquí”, le decía una aficionada y Jona le respondió: “He venido a eso, estamos trabajando, muchas gracias por su aprecio”.
Desde hace 30 años, don Leonidas Mejía, padre de Jona, dejó la colonia Kennedy en Tegucigalpa para irse a vivir a España y hace 25 años nació el que ahora es seleccionado nacional, quien ha reconocido que era un sueño vestirse con los colores de nuestra patria. “Estoy deseando conocer el lugar donde vivió mi padre”, reconoció.
Y sigue comentando: “Llevo 12 años en España haciendo las cosas bien y he trabajado para ganarme una convocatoria en la Selección Nacional y ahora Hernán Medford me la dio y estoy muy contento de integrarla”.
A medida se abría espacio conociendo el Guamilito, Jona miraba los sombreros, canastos y los vestidos típicos de Honduras, sorprendido por la forma en que los artesanos los fabrican.
ADMIRA A PAVÓN Y A SUAZO
Uno de los jugadores a quien admira Jonathan es a Carlos Pavón, el histórico goleador de la Selección y que ahora es asistente técnico de Hernán Medford. “Siempre lo he dicho, me gusta mucho Pavón y David Suazo, son mis preferidos y lo que he visto de ellos, me quedo con su fútbol”.
“La gente espera mucho de mí, pero tienen que entender que estoy en un proceso, adaptarme al país y a la Selección, ir poco a poco y ojalá que la suerte esté de vuestro lado”, comentó.
Y cerró: “Honduras es muy bonito y yo vengo a dejarlo todo por la camiseta. Cuando me vaya de aquí que sea muerto, cuando ya no pueda más”.
