Carlos Prono explota y lanza dura crítica contra selección de Honduras

Dos partidos jugados, cero puntos. Dos partidos de terror. Dos partidos jugados que no ilusionan a nadie.
Dos partidos jugados donde no se salva nadie.

Me da pesar por la gente que llegó al estadio Olímpico a presenciar el partido entre Honduras y México, y me da cólera ver a los -no sé cómo llamarlos- jugadores que estuvieron en el duelo.

No se puede jugar peor y mucho menos ser un equipo sin alma, sin entrega, con tan poca capacidad de liderazgo dentro y fuera del terreno, porque el señor Pinto también es tan culpable como el resto de los futbolistas. Iniciemos.

Cambio de planteamiento táctico, juega con una línea de cinco con Crisanto y Emilio Izaguirre para que desborden por fuera. Pregunta ¿Pasaron alguna vez la mitad de la cancha?

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Jamás, fueron dos menos en un once horrible.

Vuelvo a señalar lo que dije en alguna oportunidad y por lo cual fui criticado por algunos.

Emilio Izaguirre en la Selección no ha aportado nada, en el segundo gol parece un novato cómo pierde la pelota, es increíble que juegue en Europa y torneos tan importantes.

Sigamos.
Los centrales Figueroa y Palacios. Ambos se equivocan en el gol de Corona.

Primero, Palacios despejó hacia el centro cuando lo ideal era que el balón siguiera la misma trayectoria y enviarla al tiro de esquina, después Maynor mostró una displicencia que asustaba al marcar a “Tecatito”.

Pasemos a la portería
¿Alguien me puede decir qué quiso hacer Noel Valladares en el segundo gol? Se puso a intuir y adivinar, JAMÁS un portero debe adivinar.

Boniek García jugó al lado de Garrido, todo lo que pasó por sus pies fue a parar al adversario, desconocido totalmente.

Mario Martínez lo que pensaba seguramente con la cabeza jamás lo trasladaba a sus pies, pases erráticos y poco en la elaboración de juego, nunca pudo levantar un tan solo centro.

Un mediapunta Erick Andino que lucho, corrió y nada más.

Un solo delantero, Rubilio Castillo, quien en dos juegos no hizo ni un disparo al marco.
Ahora le toca el turno al técnico Pinto. El primer mensaje que dio fue que su equipo jugaría a muerte este partido. Por favor, jamás vi un equipo tan apático como el de Honduras.

Segundo mensaje, “tengo estudiado a México desde hace 4 meses”. Al parecer lo estudió, pero muy mal. Tercer mensaje, “iremos a buscar el partido presionando arriba”.

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Nunca presionó al rival, más bien parecía que el empate era algo que se buscaba.

No soy técnico ni dueño de la verdad, pero vengo sosteniendo que después de más de un año de trabajo no hay una base sólida ni esquema táctico que brinde garantías.

Otro error, pareciera que no vio que Boniek dio todos los pases mal, era el primer cambio, o bien metía a Bryan Acosta en su lugar y a él lo pasaba como extremo o directamente lo sacaba del juego.

Ahora hay que traer la calculadora y empezar a rezar, aunque la verdad con este equipo no tengo esperanzas, y eso que México también se conformaba con el empate.

Hay formas y formas de perder, la de ese día es la peor, hay cosas en la vida que no se negocian, una de ellas es la actitud, y en esta oportunidad la Selección salió aplazada.

La verdad, estoy muy caliente.

Hasta la próxima.

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