Sonó el silbatazo final en el estadio Sausalito y cuando el catracho abandonaba el campo vio en las gradas a un pequeño que le pidió su camisa.
Sin dudarlo, Denil caminó hasta donde este, se quitó la casaca que vestía, se la entregó y le estrechó la mano.
El niño muy feliz agradeció el gesto del defensor hondureño que viste el número 2 del equipo de sus amores.
Everton se puso sexto en la tabla de posiciones del fútbol chileno con 37 puntos y se encuentra en zona de clasificación a Copa Sudamericana.
Su próximo encuentro será de visita este sábado (3:00pm hora hondureña) ante Ñublense que marcha noveno con 33 puntos.