Muy emocionados, los jugadores llegaron al hogar con pasteles y dulces para los niños y el ladrón esperó que los jugadores ingresaran a esta instalación dejando los carros estacionados y fue cuando le abrió el vehículo a Morales.
De inmediato los futbolistas fueron alertados del movimiento cuando salieron en grupos por la colonia a buscar al delincuente quien se marchaba con el botín en sus manos dejando a Morales sin la batería de su carro.
Como policías, corriendo por las calles de la colonia Fátima de la Ciudad de El Progreso, Yoro, los jugadores de inmediato dieron con el delincuente a quien atraparon y lo pusieron pecho tierra para quitarle lo robado. Lo rodearon como hacen con los rivales y lo detuvieron.
Así quedó el carro del jugador Franklin Morales cuando le habían robado la batería.
Cuando se miró acorralado, el delincuente les suplicó a los futbolistas que lo dejaran ir y que le perdonaran por lo que hicieron, pero estos, molestos por lo que le había hecho a sus compañeros no lo perdonaron. “¿Porqué lo hiciste?”, le preguntaban, y el hombre nervioso se contradecía.
Los jugadores del Honduras Progreso disputan la final del torneo de Liga Nacional este sábado ante el Motagua en el estadio Michelleti.