La situación que se ha vivido es parecida al conflicto árabe-israelí donde dos vecinos no se podían ver porque se atacaban. El Yankel Rosenthal y el Morazán se convirtieron en coliseos de batalla y ni la Policía Nacional ha podido frenarlos.
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En esta primera reunión entre Elías Burbara, presidente de los aurinegros y Orinson Amaya, líder de los esmeraldas, buscará por fin encontrar un tratado de paz que lleve la tranquilidad a los estadios y dos equipos hermanos puedan disputar sus partidos tranquilos.
En la reunión estarán presentes los miembros de la Liga Nacional que escucharán las propuestas de ambos dirigentes que por primera vez se han dado cuenta que el problema ya no es de rivalidad si no un conflicto donde la violencia es la forma de resolver las cosas.
En horas de la mañana de este jueves, altos mandos de la Policía Nacional y miembros de la Liga Nacional tuvieron una reunión donde se discutió el tema de la violencia pero no se diagramaron propuestas. Por ahora el tema ya está en la mesa y se esperan respuestas.
