Entrenador nuevo, triunfo seguro… El Olimpia que vimos ante Real España fue otro, dejó de ser aquel equipo miedoso, jugando al contragolpe y sacrificando sus delanteros. Lo de esta noche fue psicológico, le jugó con casta a Real España que realmente tiene un grave problema; no tiene delanteros y lo derrotó 3-1.
Vamos a juego. El dominio del mediocampo de Real España es bueno, genera fútbol, mantiene la pelota pero no finaliza las jugadas y eso lo condena. Al Olimpia le bastó con tener a domador en las gradas, Keosseian solo observaba los leones en la arena así como hacía el emperador romano en el Coliseo.
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Un primer tiempo dominado por Real España pero con marcador a favor de la visita. ¿Por qué fue lo disparejo? Los albos se quedaron con 10 y se recompusieron haciendo un juego efectivo como le gusta a Keosseián.
Apenas 11 minutos de partido y el delantero Jerry Bengtson quien es un goleador comprobado, aprovechó un balón en el área tras una jugada de cobro de falta, para abrir la lata y darle seguridad a los albos.
Siete minutos más tarde se quedaron con 10 hombres por la injusta expulsión de Ever Alvarado (23 del primer tiempo) quien se barrió escondiendo los tachones y Olimpia se reagrupó. Esa es la ventaja de contar con jugadores de experiencia que no se metieron atrás, al contrario, se pusieron a darle velocidad a los laterales que llegaron con peligro.
Cuando dominó la Máquina con un hombre más estuvieron a punto de igualar. Al jovencito Jorge López le pusieron una pelota para hacerlo grande pero al ver que era demasiado fácil, al delantero le temblaron las piernas e increíblemente sin portero hizo el ridículo y la voló.
SEGUNDO TIEMPO MERENGUE
Olimpia jugó mejor con 10 hombres en el complemento. El los visitantes Jerry Bengtson se puso la capa de espada, aprovechó la velocidad, 'Patón' Mejía puso la gallardía, Deybi Flores mostró su temple y serenidad y Elmer Güity los mató con su velocidad.
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Como una gacela, Bengtson aprovechó para meterse en medio de los defensas que solo le engalanaron la jugada, nadie le hizo falta y cuando entró al área, con la frialdad que lo caracteriza, levantó el balón con un sombrerito espectacular y el león mostró las garras al 47.
El cuadro del “Tato” García fue como esas parejas que van a la fiesta, bailan toda la noche y cuando se termina la rumba, la chica se va con otro que la aprovecha. Benavídez hizo un buen partido, probó de media distancia y puso buenos pases, Mario Martínez estuvo entre chispazos y los delanteros fueron el mal de los aurinegros.
Para la honra, Johnny Leverón, lateral izquierdo se fue al ataque y conectó un centro empalmando un buen centro para descontar. Fue apenas para apaciguar porque Olimpia fue decidido a rematar el encuentro y no complicarse porque estaban jugando con un hombre menos.
La defensa fue impecable, tras el gol de Leverón sellaron el agujero que había hecho Real España y se miró la mejoría. Un contragolpe letal de Elmer Güity sirvió para desestabilizar la zaga del Real España y tras un mal rezago de Montes, la recuperó el “Patón” Mejía quien sirvió a Rony Martínez que marcó un golazo con un derechazo imposible para López.
Los olimpistas han vuelto a sonreír, jugador diferente, espantaron los fantasmas que perseguían a Nahún Espinoza y con Keosseiánn como domador, lograron tres puntos que los mantiene invictos y en el primer escalón a seis puntos del repechaje que por ahora lo mantienen Real España y Marathón.
