Donis Escober hizo todo lo posible por llegar al clásico de este domingo ante Motagua, pero el dolor en sus rodillas fue más grande a tal grado que no podía terminar los entrenamientos ya que las articulaciones las tiene deterioradas.
Desde la cama del hospital Cemesa donde fue operado este jueves, el portero del Olimpia revela a DIEZ el drama que ha venido cargando desde hace ocho años en los que ha sufrido en silencio y tomando muchos medicamentos e inyectándose para poder soportar.
Ver: ASÍ FUE LA OPERACIÓN DE DONIS ESCOBER
Hubo ocasiones en las que el guardameta tuvo que aguantar un dolor insoportable cuando vestía la camisa de la Selección Nacional sobre todo en las prácticas con Jorge Luis Pinto. “No soportaba las rodillas al final”, cuenta el guardián que termina contrato con Olimpia en mayo.
¿Cómo salió de su operación en la rodilla?
Gracias a Dios bien, no era tan grave como creíamos con el doctor, pero sí estaba muy preocupado por los dolores que sentía y por cómo se venía manejando. Ya durante la operación pude verlo y noté que no es tan delicada la cosa.
¿Cómo habían sido sus días con esta lesión en las rodillas?
Muy tristes, es un dolor que es a diario, lo sufría en los entrenamientos y me tenía bastante desesperado, pero cuando uno ama lo que hace es capaz de realizar esos esfuerzos, pero últimamente ya no aguantaba el dolor y por eso tomé la decisión de operarme y me siento contento porque salieron las cosas bien.
¿Qué tan fuerte era ese dolor?
No era cómodo, aparte no entrenaba al 100%. Las prácticas eran fuertes, pero no las disfrutaba porque el dolor era demasiado y no me dejaba saborear lo que hacía.
Estaba desesperado por el dolor y ya llegué al límite y no me ayudaba mucho ya que los medicamentos no me llegaban y tomé la decisión con el doctor Óscar Benítez y lo más correcto es que me hice la limpieza para que el dolor pueda desaparecer.
¿Desde cuándo comenzó a sentirlos?
Siendo sincero ese dolor lo traigo desde hace unos ocho años. Al inicio era algo que lo manejaba con los medicamentos, lo toleraba y entrenaba tranquilo porque tomaba una pastilla y la molestia desaparecía.
Pero mientras el tiempo pasaba el dolor cada día era más fuerte, desesperante que no lo soportaba. Por eso analizamos y tomé la mejor decisión, confío en Dios que este dolor tan fuerte desaparezca.
Me imagino que estando en la Selección venía sufriendo este dolor y se lo guardaba…
Sí, allí era más triste y la única forma de calmarlo era cuando el doctor Óscar Benítez fue a visitarme y le dijo al profesor que las cargas tenían que ser menos, pero con Jorge Luis Pinto eso no valía… era triste porque se trabajaba más fuerte y los dolores eran intensos.
¿Cómo eran esos momentos con la Selección con jugar Pinto al sentir esos dolores?
Ya para los partidos tomaba medicamentos y no se sufría mucho, al final ya cuando los partidos iban a terminar sentía un poquito más, pero era dolor que toleraba.
El portero del Olimpia Donis Escober en la sala de recuperación tras ser intervenido de la rodilla.
Eso frustra, pero amo mi trabajo porque sabía que valía la pena, pero la verdad es que no lo soportaba porque últimamente el medicamento cada día que pasaba no me llegaba, las pastillas y las inyecciones no me quitaban el dolor y eso era preocupante. Por eso vine dispuesto a lo que el doctor me dijera.
Eso fue lo que pasó la semana pasada que estuvo en la banca pero no pudo jugar ante Platense…
Es correcto. Venía jugando tranquilo y toleraba bien el dolor, pero contra Platense tomé el medicamento, a la hora del partido hice el calentamiento pero el dolor era demasiado fuerte y así era difícil jugar.
¿Es consciente que a su edad suelan venir estos achaques, son 38 años y más de 20 de carrera?
Claro, es que les he dado mucho trabajo. Hablamos de una exigencia grande, nunca he tenido reposo, cuando terminaba el torneo con Olimpia pasaba a la Selección Nacional y casi nunca le di descanso al cuerpo y la rodilla la venía manejando así llegando al límite pero ahora esperamos que en el nombre de Dios pueda salir bien.
¿Cómo mira ahora ya operado la continuidad de su carrera en el fútbol?
Siendo sincero, si esto no salía bien y era delicado, era la salud primero y si era el final de mi carrera, me retiraba porque era desesperante, pero ahora con el diagnóstico que me dio el doctor me dijo que la rodilla no está tan dañada y que puedo seguir jugando si así yo lo requiero.
Me imagino que quiere seguir jugando…
(Risas) No quiero retirarme, pero para seguir jugando uno tiene que estar en buenas condiciones, tener equipo y yo solo tengo contrato en el equipo hasta mayo y mi sueño es retirarme en el Olimpia, pero si el club no me da la oportunidad de seguir, tengo que pensarlo bien porque tengo un sueño y yo lo quiero cumplir.
¿Qué tal lo ha tratado el Olimpia?
Muy bien, la verdad que no puedo quejarme, son 21 años de estar dentro de la institución y me han tratado bien. Uno a veces no recibe cosas materiales pero si emocionalmente ha tenido cosas que le han llenado mucho.
¿Arriesgaría seguir jugando si los dolores le siguen causando molestias?
Vamos a ver cómo va evolucionando todo, ahora comenzamos un proceso de recuperación y el doctor ya me dio su punto de vista médico, pero voy a ver cómo me siento yo de esta operación y como quedo, de eso decido. Mi prioridad es mi salud en este momento porque son muchos años los que llevo sufriendo con este dolor y no quiero vivir un día más con esto, mi prioridad es la salud primero y si se da la oportunidad de jugar en alto nivel, lo seguiré haciendo.
Pero prácticamente en este torneo le dice adiós a las canchas…
Voy a hacer el esfuerzo para poder estar en la instancia final con el equipo, pensando siempre que el equipo clasifique a instancias finales, pero repito, ahora lo primordial es mi salud porque vienen cosas difícil, quiero que ese dolor no vuelva a aparecer… quiero pensar solo en recuperarme bien para estar en los partidos finales.
¿Siendo consciente, pudo postergar la operación para jugar el clásico ante Motagua?
Te soy sincero… Hice todo el esfuerzo anteayer, tomé todo el medicamento para ver si el dolor desparecía, me metí cualquier cantidad de pastillas arriesgando mi estómago que no es saludable para mi cuerpo. Quería jugar ese partido, hice todo el esfuerzo humano pero el dolor nunca desapareció y por eso determiné operarme.
¿Le preocupa al ver futbolistas que han quedado lisiados tras sufrir estas lesiones?
Ese es mi temor, he visto compañeros de profesión que han quedado mal. ¡Imagínate retirarme y quedar mal de salud! No es conveniente. Ayer que el doctor estaba haciendo la cirugía me dio esperanzas de que la rodilla no está tan desgastada.
¿Termina contrato con Olimpia?
Si lo termino en mayo, pero si me recupero bien y siento que puedo dar más y a la hora de entrenar la rodilla no me duele, es tolerante al dolor, siempre y cuando ellos me den la oportunidad no lo pensaré, pero ahora solo quiero estar bien.
¿Cómo miró a Alex Güity, le ve futuro como portero?
Excelente. Es mi ficha como decimos, es un arquero que viene luchando, que trabaja fuertemente y para mí es que va ser uno de los grandes porteros del fútbol hondureño.
Y llega el debut en un momento inesperado…
Le dije que nació con una suerte ya que el primer día que sale concentrado con el primer equipo ese día debuta, es algo que no todos tenemos esa suerte. Gracias a Dios las cosas le salieron bien porque pudimos ganar y el equipo puede contar con un buen arquero.
¿Queda en buenas manos el marco olimpista para el clásico?
Estoy seguro que si las cosas las sigue haciendo como ha venido trabajando no tengo duda que hará un gran partido.
