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Los azules lo ganaron 2-1 con goles de Diego Auzqui y Marcelo Pereira, sin embargo, los ánimos se calentaron sobre el final del encuentro, donde los jugadores comenzaron a darse con todo, hasta el hecho de llegar a los golpes.
Las discusiones se fueron subiendo de tono en el epílogo del encuentro. Los jugadores del Vida se enfadaron porque pidieron la expulsión del argentino Auzqui por un codazo contra uno de sus compañeros pero no pasó nada.
Ya una vez finalizado el partido, se armó la bronca. Los jugadores del Motagua y Vida se fueron encima a insultarse y pelearse, hasta llegar a los puños. Carlos 'Mango' Sánchez y Cristopher Meléndez se dieron con todo y el árbitro Orlando Hernández los tuvo que expulsar ya cuando el juego había culminado.
De acuerdo a lo insertado en el acta arbitral del colegiado, Carlos Horacio Argueta, que fue extrañado en medio del juego, fue expulsado por ser culpable de juego brusco grave y Carlos Sánchez una vez finalizado el partido por ser culpable de conducta violenta (Puñetazo), así como también el motagüense Cristopher Meléndez.