Liga Nacional

Elkin González: 'Con Pedrinho nos fuimos a los golpes y le tiré un macanazo'

Elkin González está cerca de su retiro como profesional y además repasó algunos instantes de su vida personal, recordó el duro momento cuando él y su esposa perdieron a una bebé

2017-02-07

El mismo Elkin González me dijo que cuando miraba a los periodistas se les escondía, que no le gusta el protagonismo y mucho menos las cámaras, el veterano volante del Real Sociedad y ex del Real España, accedió a una extensa plática sobre su vida personal y su larga carrera, la que según me confirmó, está cerca de llegar a su fin.

Elkin, parecés un buen tipo, nunca estás metido en rollos, de vos casi no se sabe nada, te has sabido llevar en esto del fútbol.
Es por mi forma de ser. Incluso, cuando recién venía empezando, que no jugaba mucho, yo me escondía de los periodistas, hasta hoy lo sigo haciendo, nunca me ha gustado esa parte de pleitos, de polémicas, siempre he sido un tipo muy tranquilo, paso mucho tiempo en la casa, soy muy hogareño, me encanta pasarla con mi esposa, con el niño y nada de polémica.

¿Ya que sos un hombre muy hogareño, qué es lo que hacés ahí, no te aburrís?
No, no me aburre estar en casa, nunca he creído que pueda aburrirme. Fíjate que cuando estamos en la casa, el tiempo de mis vacaciones yo lo paso ‘full’ con ellos, todo el tiempo, si voy a salir a correr un rato por las tardes trato de irme en familia, llevarlos para pasar el mayor tiempo posible con ellos, si salgo a hacer algún mandado. Siempre estoy con mi hijo.

¿Te consideras que sos el esposo soñado o deseado por tu esposa?
No tanto así, yo creo que no, uno quiere ser el mejor esposo, porque hasta la misma Biblia te habla de que tanto la mujer debe ser para el hombre como el hombre para la mujer, sobre todo en el matrimonio encuentras tantas diferencias entre la pareja, pero por mucho que uno quiera ser el esposo soñado, es imposible porque ella es de una forma de ser y yo de otra, entonces siempre hay diferentes maneras de pensamiento y a veces chocan, pero ya voy a cumplir nueve años de matrimonio y la verdad que han sido una bendición como esposos.

¡Te felicito!
Nos hemos disfrutado, hemos pasado momentos duros, tenemos un varón y ya venía en camino otro bebé; estaba peleando semifinales contra el Honduras Progreso, me acuerdo, y habíamos ganado aquí en Tocoa, yo iba en camino para El Progreso, pero me llamó mi esposa, faltaban diez días para que naciera y resulta que el bebé estaba muerto dentro de ella, fue un momento duro. Ya teníamos todo preparado para recibirla, el cuarto, la casa ya estaba lista, mi esposa se había esforzado en eso. Hay momentos duros en la vida.

¿Era niña o niño?
Era una niña, estábamos esperando tener la parejita y aparte ya tenía prácticamente los nueve meses de embarazo, faltaban diez días para dar a luz, estábamos muy emocionados.

¿A qué se debió la muerte de tu niña?
La verdad nunca nos dieron una razón específica que dijeran es por esto y esto, una razón clara, contundente. Uno que no sabe de medicina tiene que aceptar lo que te dice el doctor.

¿Te parece que quizá hubo negligencia médica?
No sé, dentro de los estudios que mensualmente se le hacían, ultrasonidos y todo, revisiones, estaba bien, pasó esto y fue algo bien duro, pero siempre lo hemos superado y son cosas que ocurren en la vida y al final uno debe reponerse de eso y salir adelante.

¿Qué nombre le iban a poner a tu niña?
Se iba a llamar Dayana Abigaíl.

¿Lograste tenerla en tus brazos?
Sí, me tocó tener a mi hija en mis brazos, pero ya sin vida, cuando me la entregaron muerta, ahí mi esposa no la pudo ni cargar, porque a ella le tuvieron que hacer cesárea para sacársela y entonces lo más recomendable era no mostrársela, porque capaz de la impresión, de lo fuerte se le podría abrir la operación o le podía pasar algo, entonces me tocó recibirla con mis suegros y con mis cuñados.

¿A quién se parecía, qué rostro le viste a ella?
Yo creo que a mí, logré ver mi rostro en ella, mi esposa es bien blanca, con sangre de la gente de Santa Bárbara. Mi hijo dicen que tiene mi cara, que se parece a mí, blanquito, por ella y la niña también tenía bastante parecido al varón.

¿Te ha costado recuperarte?
Eso es algo que nunca se olvida, Limber, eso es algo que cuando uno queda viendo fotos, queda el recuerdo, siempre creo que para esta fecha tuviera tantos años, ya tuviera tanto tiempo de vida, ya estuviera esto y lo otro. Es algo que no se olvida, que siempre lo marca a uno, pero uno debe asimilarlo, tiene que seguir la vida, no hay de otra que continuar hacia adelante.

Elkin, hablando de otro tema, has jugado ocho finales, solo ganaste dos y has perdido seis. ¿Crees que ha sido algo muy injusto?
Tal vez, pero el fútbol es así, no es un deporte individual, no ha dependido de mí, acá somos todos, jugadores, dirigentes, cuerpo técnico, es determinante el buen trabajo que hayas logrado hacer en todo el torneo, te diré que duele mucho no ganar los campeonatos que he perdido.

Foto: Diez

El jugador Elkin González junto a Limber Pérez luego de la amplia entrevista brindada.

Te ha tocado perder todas las finales con la Real Sociedad. ¿Hay esperanzas que este equipo quede campeón?
Sí, claro, no tengo duda de eso, el equipo está conformado por buenos jugadores, los campeonatos que hemos perdido han sido por falta de contundencia, siempre hemos jugado buenas finales, pero nos ha faltado ser eficaces, creamos opciones y no hemos dado ese toque final. Para que este equipo sea campeón, tiene que llegar a meterla y no darle opciones al rival.

El Real Sociedad ha demostrado que es un club especialista en hacer que los equipos lleven una copa a sus vitrinas.
Solo hemos tropezado, claro que nos hemos caído, pero esto es parte del fútbol y de la vida, no podemos suicidarnos, no debemos seguir quejándonos. Este equipo ya sabe jugar finales, eso es bueno y solo falta aprender a ganarlas.

Elkin, este equipo ha demostrado que no puede ser campeón, son cuatro finales que ha perdido. ¿Celebran el segundo lugar ustedes?
No, cómo puedes creer que haríamos eso, tenemos que cambiar esa mentalidad y el pensamiento de todos los que creen que este equipo es especialista en perder finales, debemos trabajar para quitar eso de no salir campeones, ese negativismo; es cierto, muchas personas piensan de esa manera, la tarea que tenemos los que estamos ahora o los que vengan después al equipo, es cambiar la historia, ser campeón para que las cosas mejoren. No estamos acostumbrados a perder las finales, a nadie le ha caído bien esos momentos desagradables, este es un equipo que piensa en grande, nunca hemos estado cerca del descenso, eso aquí no se menciona. Trabajamos para ser campeones, la quinta será la vencida.

¿Cuándo piensas en retirarte del fútbol profesional?
Ya lo pensé bien, llegó el momento de retirarme, tengo la edad para comenzar a programar mi retiro, cuando veo correr a un joven con toda la energía, veo que ni con un lazo lo agarro, pero creo que aún me siento bien físicamente, hay razones que pesan, ya no es como antes, el fútbol me ha dado todo, pero he comenzado a pensar en dejarlo definitivamente.

¿Cuándo tienes contemplado decir que esto se acabó?
Cuando termine mi contrato con Real Sociedad, creo que será la fecha límite, hay que darle espacio a los más jóvenes y yo me dedicaré a otras cosas y darle el mayor tiempo posible a mi familia.

Elkin, sos de los pocos jugadores de la liga nacional que siempre están actuando con una gran timidez?
Es parte de mi personalidad, porque desde pequeño he sido así, incluso, era hasta más tímido cuando era niño. Siempre fui tranquilo, educado, responsable, eso es mi vida personal, pero ya una vez que estoy dentro de un campo, siempre peleo por un resultado, por los logros que uno quiere tanto en un equipo. Ahí todo es muy diferente, ahí me he ido a los puños con los compañeros, peleo, alego con árbitros, soy peleón, lucho por el club. Esas son dos etapas de como soy.

¿Por qué te transformas tanto en la cancha?
Soy más agresivo, soy más luchador, hay varios compañeros que saben cómo era de peleón antes, me peleaba en los entrenamientos. No sé si te recuerdas de una vez, yo creo que ya te habías ido del España, con Pedriño nos fuimos a los golpes, bueno, yo le tiré un macanazo y la verdad él no siguió peleando.

¿Te atreviste a enfrentar a Pedrinho?
Sí. Era atrevido, no medía las consecuencias, ¿sabes cómo es intentar liarse a los golpes con alguien más alto y corpulento que vos?

Sí, Pedrinho mide 1.90, te podía meter a la bolsa y hacerte salchicha.
Claro que sí, estábamos en un espacio reducido, esos ronditos que usan los entrenadores mexicanos, me pegó una patada, entonces yo de volada se la regresé, pero él no siguió, fue prudente, no quiso más polémica y ahí paró. Después fue con Emilson Da Silva, aquel sí me pegó una patada, se la regresé y él me dio otra, era peleón, mecha corta.

¿O se habrá detenido Pedrinho porque habrá creído que vos lo podías trompear?
No, él era un caballero, fue muy prudente, yo era un ratoncito al lado de él, en los entrenamientos y en los partidos soy bufón, él era un tipo altísimo, aparte la personalidad de Pedrinho era así, tranquilo, siempre se me viene a la mente ese momento, lo mejor que pudo haber pasado fue que él no me haya dado bola, en un mano a mano en los golpes era carne fresca para Santana.

Dos jugadores amantes del balón enfrascados en una pelea pasajera, ¿eso normalmente ocurre entre dos picapiedras?
Cosas de entrenamientos, yo quería el balón y él la aseguraba, la temperatura en San Pedro Sula hace que pasen situaciones como esas, además, por ratos los compañeros se burlan de uno cuando te están dando un baile y eso no me gustaba. Luego le ofrecí disculpas.

Las dos peleas que has tenido han sido contra jugadores brasileños, ¿tenías algún prejuicio contra ellos?
No, para nada, pasa que Emilson Da Silva, también era igual que yo, mecha corta, te diré que fue en un espacio reducido, me dan un balón a mí, cuando él me quiere venir a apretar, yo la doy de primera y él llega y me da la patada, yo la sentí que fue muy descarada, regresé y se la devolví, pero aquí todo cambió, este no se paró y me pegó un golpe a la oreja, me sonó, tuve que tranquilizarme, estábamos con ‘Primitivo’ Maradiaga. Al final del trabajito el entrenador nos llamó a una esquina a los dos y nos dijo, se quieren agarrar, se quieren agarrar a macanazos, aquí tienen una esquina, agárrense ahí, quiero verlos, pero no pasó a más. Nos causó risa.

¿“Primi” después les dio permiso para que tiraran unos golpes?
Sí, para que nos quitáramos esa cólera que teníamos, si teníamos algún problema personal los dos, que no era ese el caso, que solo fue un problemita del momento. Cuando Primi nos dijo eso nos sonreímos, nos reímos porque ya la cólera del momento ya se nos había pasado, entonces nos disculpamos ahí en buena onda.

¿Estás seguro que no tenías ningún problema en contra de los jugadores brasileños?
Nunca tuve prejuicios hacia nadie, fue una casualidad nada más, pero nada que ver, he tenido una buena relación con todos. Son cosas que pasan, nada más.

¿Qué razones te hacen creer que debes pensar en dejar el fútbol?
Me ha tocado perder varias finales, pero de cada una de ellas aprendí mucho. además, las que gané las pude disfrutar.

'Estuve nueve años en el real españa y siempre estaré agradecido por todo lo que viví ahí desde las reservas. gané dos títulos y fue maravilloso”.