“A Marlon Licona lo trajimos cuando hacíamos las competencias de escogencia de lentos y él vino de la zona de Olancho y ahí lo vimos y lo dejamos porque tenía buena estatura y buenos conceptos”, aseguró Miguel Escalante, técnico de la Sub-17 en 2006 y 2007.
DESDE EL PRINCIPIO SE LE OBSERVÓ SU CAPACIDAD
“Él tenía talento y eso es lo que nosotros miramos, luego empezamos a trabajar ya que el venía de una ciudad donde no le enseñaron absolutamente nada, él era un atajador se puede decir, pero le empezamos a enseñar técnicas de “Mango” Enríquez, quien comenzó a trabajar con él, luego fue mejorando”, aseguró.
La mano derecha de Escalante en el Mundial de Corea del Sur, Jorge Jiménez, recuerda cómo fue que se dio la posibilidad para que Licona jugara de titular en ese campeonato.
“Me acuerdo que antes de enfrentar el premundial en el último amistoso ante Costa Rica, Francisco Reyes se lesionó y quedó él en el puesto de titular, jugando los tres partidos del Mundial y hemos visto su crecimiento en la Sub-20, luego en la Sub-21, solo que ahí sí le ganó el mandado José Mendoza”, dijo Jiménez.
CASI COMPLICA SU CARRERA
Al inicio de su carrera su futuro se pudo ver entorpecido por la inmadurez de su edad, pero a tiempo pudo rectificar.
“él estuvo a punto de irse de la preselección porque desde un principio lo miramos que no mostraba ningún interés y me tocó darle un ultimátum”, nos cuenta Escalante.
“Si no me equivoco una vez lo convoqué y no vino, al siguiente día le dije que tomara sus cosas y que se fuera, luego me dijo que le diera una oportunidad, hablamos y lo hicimos, y pues fue ahí donde me dijo que iba cambiar que iba a ser diferente”, comentó.
Hoy en día está a las puertas de cerrar su primera final como titular y celebrar un campeonato.
