¡Motagua y Honduras Progreso empatan en un partidazo de final!

La ida de la final fue lo que todos esperábamos. Hubo buen fútbol, goles y la que más gananciosa salió fue la afición que desde muy temprano abarrotó el estadio Nacional de Tegucigalpa y que antes del arranque de las acciones, rindió un merecido tributo al fallecido Arnold Peralta.

Honduras Progreso y Motagua igualaron 3-3 en un apasionante choque en el que sobró espectáculo, grandes definiciones y dos equipos dispuestos a todo con tal de poner la moneda del título a su favor.

El empate fue justo, pero lo hecho por los ribereños les da más mérito pues desde el minuto 13 tuvieron que remar contra la corriente al quedarse con un hombre menos por la expulsión de Juan Delgado.

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Desde el inicio, el duelo prometía espectáculo. Apenas al minuto 4 y tras un error de Marlon Licona, al intentar salir jugando desde su meta, fue aprovechado por el ariete progreseo que definió a lo grande para poner a celebrar a los suyos.

Había delirio en el equipo de Héctor Castellón, pero como un animal herido, Motagua se lanzó con todo en busca del empate y lo conseguiría al minuto ocho.

Eddie Hernández aprovechó un mal rechace del portero West y de zurda puso el 1-1 para desatar la locura azul en el coloso capitalino, que se terminó de desbordar 20 minutos más tarde con un golazo, otra vez de Eddie.

Conectó de cabeza, dejó sin posibilidades a West, corrió hacia el banquillo azul, pidió una camiseta y rindió su tributo personal a Arnold Peralta. Levantó la elástica azul con el número 17 y el nombre del malogrado seleccionado nacional, provocando el delirio y admiración de los presentes.

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El 2-1 era justo, pero lejos de desmoronarse, el Honduras Progreso sacó fuerzas de flaqueza, demostró que la gran campaña regular que hizo no fue casualidad y sus mejores hombres se hicieron sentir.

Al 38, Franklin Morales empató de nuevo los cartones y los motagüenses no lo creían. Con un hombre menos, siendo arrinconados por momentos, pero seguían con vida.

Antes del final del primer tiempo, Israel Silva volvió a poner adelante en el marcador a Motagua en una primera parte frenética, espectacular.

EL COMPLEMENTO, UN CONCIERTO DE AMBOS

Apenas se inició la parte secundaria del encuentro, el Honduras no cambió su postura, sus hombres en defensa se mantenían precavidos y los de ataque, con su velocidad, comenzaron a demostrar que se le podía hacer daño a Motagua.

Tal es que a los 53, una enorme jugada de Franklin Morales, que sirvió para Elvir, terminó con la igualdad 3-3. El exOlimpia recibió la pelota, la acomodó de derecha y con un toque magistral de zurda, venció a Licona y emparejó los cartones.

Desde ese momento, el encuentro se tornó de ida y vuelta, ambos entrenadores movieron sus banquillos en busca de la victoria, pero ninguno de los dos se tiró atrás, su apuesta siempre fue ir al ataque, agradar al espectador.

EL FALLO DEL JUEGO:

Eso sí, pese a jugar con 10 hombres, la más clara del encuentro la tuvo el Honduras Progreso, quien pudo pegar duro y fuerte para llevarse el triunfo y la ventaja a casa, pero Ángel Tejeda erró en el momento menos oportuno.

Al minuto 71, Tejeda recibió gran pase de Fredixon Elvir, se fue solo ante Marlon Licona, pero en lugar de encararlo y eludirlo, intentó hacer un golazo al estilo Messi, pero el meta motagüense adivinó sus intenciones y evitó el gol.

Al final, Motagua lanzó sus embates para salir vencedor, pero el meta West y el orden defensivo del Honduras, decretó que el 3-3 era lo más justo.

¡Gran homenaje al fútbol en el Nacional!

ALINEACIONES:

MOTAGUA: Marlon Licona; Omar Elvir, Wilmer Crisanto, Juan Pablo Montes, Júnior Izaguirre, Marcelo Pereira, Irvin Reyna, Héctor Castellanos, Santiago Vergara, Israel Silva y Eddie Hernández.

HONDURAS PROGRESO: Woodrow West; Carlos Sánchez, Pastor Martínez, Jorge Zaldívar, Raimundo Cálix, Dilmer Gutiérrez; Juan Delgado, Mariano Acevedo, Franklin Morales; Ángel Tejeda y Fredixon Elvir.