2016-01-24
Cuando parecía que el clásico capitalino terminaría empatado sin goles, a falta de cinco minutos el árbitro
Geovani Mendoza pitó una falta penal en favor del
Olimpia y Ever Alvarado marcó el solitario 1-0 con el que vencieron al Motagua.
Se jugaba el minuto 85 cuando en un contragolpe Alberth Elis se quitó la marca de Juan Pablo Montes y el arquero Sebastián Portigliatti le entró con todo y lo envió al suelo.
Mendoza no lo dudó y decretó la pena máxima que convirtió en gol Alvarado y puso a la afición merengue a festejar.