2017-01-16
Stanislas Wawrinka tenía todas las opciones imaginables para sellar el 5-4 en el segundo set frente al eslovaco Martin Klizan. Una pelota cómoda, blanda y con mucho espacio para elegir.
Pero el suizo optó por la peor.
Su rival estaba rendido, ya casi dispuesto a comenzar el siguiente game. Hasta que vino el ‘cañonazo’ del helvético, que fue a darle justo en la parte baja a Klizan, quien cayó al piso y se retorció de dolor.
Wawrinka saltó la red, preocupado por la condición de su adversario. Se disculpó. Al rato, le quebró el saque y se llevó el partido por 4-6, 6-4, 7-5, 4-6 y 6-4.