No Todo es Futbol

Las pasiones deportivas que movieron a Hugo Chávez

Hugo Chávez era amante del béisbol, adquirió pasión por el fútbol, el boxeo y también el automovilismo.

2013-03-05

Hugo Chávez murió este martes en Caracas, pero deja un legado en deporte, marcó un camino distinto en el deporte de Venezuela, al grado de convertirse en una verdadera alternativa de realización nacional.

Chávez guardó una profunda pasión por el beisbol y de niño sonó con jugar en las Grandes Ligas. El mandatario -cada que podía- hacía un alto es sus actividades presidenciales para jugar al béisbol en compañía de jefes militares y ministros.

Otra afición que adquirió Hugo Chávez es la del futbol, en especial cuando la selección nacional de Venezuela jugaba; por ser un representante de las ideas de la Revolución Bolivariana, al igual que con los demás representativos nacionales.

El mayor apoyo que le dio al balompié fue el de organizar la Copa América de 2007; la cual fue usada como herramienta política y vitrina para proyectar los logros obtenidos con la Revolución.

El boxeo también parece haber sido del agrado de Chávez, pero como buen político, también lo usó en su beneficio.

Durante su última campaña presidencial, el mandatario posó con unos guantes de box con los que alentó a sus seguidores a no bajar la guardia y a redoblar el paso de caro a las elecciones que se realizarían el 7 de octubre de 2012.

Un representante de la relación del boxeo y el chavismo fue el púgil Edwin Balero, quien tenía un tatuaje de Hugo Chávez y siempre mostró una gran relación con él.

Una de las últimas aficiones que adquirió fue la del automovilismo, el cual consideraba como elitista, pero a partir de la aparición de Pastor Maldonado, piloto de fórmula Uno, su opinión cambió.

Tal vez la relación más estrecha que Chávez tuvo con algún deportista fue con el argentino Diego Maradona, con quien compartió la ideología socialista.

El mismo Maradona declaró alguna vez: “Es un orgullo poder estar al lado del presidente, porque lucha por la gente, lucha por su país, lucha por sus ideales y estoy con él a muerte, permanentemente, escuchándolo cómo defiende todas sus posturas y me parece fantástico”.