La historia de
Osiris Marisela Casula, madre de dos niñas y apasionada por el deporte en especial por el fútbol americano, es de fortaleza y admiración. Ella demuestra a muchas mujeres que las cosas se pueden lograr sin importar el género.
Con mucha pasión y dedicación
cada día llega a los campos de la capital impulsando a todas sus compañeras para que lleguen a los entrenamientos del equipo que ella misma hizo realidad.
Osiris siempre lleva a sus hijas Bárbara y Nora Casula.
“Fundé Vikingas el 6 de agosto del 2015, la Federación me dio la oportunidad de poder formar el primer club femenino de fútbol americano, ahora somos una ONG en desarrollo”, dijo Osiris.
Ahora están cerca de cumplir su primer aniversario y ya llevan pasos adelantados para la construcción de su estadio. “Vikingas ya no solo es un equipo de fútbol, también es una organización sin fines de lucro y ya tiene el terreno para formar el primer estadio oficial de fútbol americano”, indicó Casula.
JUGÓ CON HOMBRES Una de las cosas a destacar en Casula es que sus inicios en esta disciplina fueron en la Liga de hombres.
“En 2014 cuando terminaba la temporada de varones fui a pedir una oportunidad al equipo Espartanos, que ya desapareció, en ese momento me dijeron que sí, pero que los exonerara de responsabilidades por lesiones”, recordó.
Además añadió: “Compré una auténtica y fui con un notario para hacer esa carta donde explicaba que no responsabilizaba ni al equipo ni a la federación por algún daño físico y participé con ellos”.
Foto: Diez
Su primera experiencia con los “machos” no la intimidó y supo ganarse el respeto de todos sus compañerow y adversarios. “Cuatro meses después el equipo desaparece y luego fui absorbida por uno de los mejores clubes, el Centauro, fue con ellos que realmente florecí de manera deportiva”, comentó Casula.
“Comencé a participar en partidos amistosos y un tiempo después sucedió algo inédito para el deporte que una mujer participara en partidos de Liga, es algo oficial dentro del deporte”, aseguró.
LO INOLVIDABLE Algo que nunca saldrá de la memoria de Osiris es todo lo que vivió y aprendió jugando con los varones. “Allí conocí que mis limites están más allá de lo que pensaba, pude constatar que las personas son solidarias cuando otra quiere lograr metas”, expresó.
Las Vikingas van a Son José Costa Rica a participar en el torneo Tropic Bowl que se realizará del 12 al 16 de mayo ante una selección del país tico.
SUS FRASES: 'Recibí muchos golpes fuertes cuando jugaba con los hombres, pero ninguno que me provocara una lesión porque la técnica era la correcta, me habían entrenado para eso”.
'En el fútbol americano se explota todo, es como la natación que aquí uno mueve todos los músculos e incluso es un deporte muy catártico porque uno puede llegar estresado y sale relajado”.
