López Rivera, de sólo 19 años, perdió un cerrado combate ante un rival más técnico y de mayor experiencia, que fue cuartofinalista en el Mundial de 2015 y subcampeón europeo ese mismo año.
'Me quitaron la pelea por ser de un país pequeño, y como Honduras no aporta dinero a la AIBA, por ahí van los tiros', dijo López Rivera en zona mixta poco después de su derrota.
El joven, que tuvo buenos pasajes en el combate, se vio algo frustrado por el mayor alcance del francés, que le controló con su jab.
'La gente sabe que yo gané, aunque no hice todas las cosas que me dijo mi padre en la esquina, pero que haya perdido de forma unánime. ¡No, hombre!', se lamentó el hondureño.
Este fue el golpe que se llevó Teofimo López en medio de la pelea.
López Rivera nació en el barrio neoyorquino de Brooklyn, de padres inmigrantes hondureños, pero se desarrolló boxísticamente en Nueva York, siendo considerado uno de los prospectos de Estados Unidos.
'En Estados Unidos fui campeón Guantes de Oro y el mejor boxeador de las preliminatorias pero no me dieron chance y decidí pelear por Honduras', aclaró el joven estudiante de negocios en Fort Lauderdale, Florida.
'Siento que le di esperanza a un pais y esa esperanza nos la ha quitado AIBA', manifestó.
'No estoy diciendo que soy Dios pero mi ejemplo ayuda a los niños de la calle que venden drogas. Pero con gente así como AIBA no puedo hacer nada', subrayó López Rivera.