El pitcher Mike Fiers ejecutó una bola rápida y que alcanzó las 88 millas (141 km) por hora y golpeó a Stanton en la altura del pómulo izquierdo.
Inmediatamente Stanton cayó al piso, y los miembros del equipo médico de ambos equipos fueron a atenderlo. El pitcher Fiers se llevó las dos manos a la cabeza.
Por largo rato Stanton estuvo inmóvil, y luego estiró un poco las piernas. Tras unos minutos fue puesto en una camilla y subido al carrito ambulancia que lo sacó del terreno de juego.
El bateador de los Marlins salió del campo con el rostro ensangrentado, sufrió varias fracturas en el rostro, laceraciones y pérdida de varias piezas dentales.