La sanción impide por el momento a las selecciones japonesas masculina y femenina disputar cualquier torneo FIBA.
La nueva liga, cuyo nombre oficial aún no se ha decidido y cuya primera temporada arrancará en octubre de 2016, reemplazará a la bj-League y a la JBL, en las que jugaban respectivamente 22 y 13 equipos.
La presentación oficial de la liga la llevará a cabo mañana el expresidente de la asociación nipona de futbol (JFA), Saburo Kawabuchi, que encabeza el comité encargado por la FIBA de gestionar la fusión de ambas ligas.
Kawabuchi fue además el primer presidente de la liga de futbol profesional japonesa (J.League), fundada en 1993.
El plan es tener establecida, para mayo, una primera división de entre 12 y 16 equipos y otras dos divisiones inferiores.
Los equipos en la primera división deberán disponer de un pabellón con capacidad para al menos 5 mil espectadores y una facturación anual en torno a los 250 millones de yenes (1,9 millones de euros/2,09 millones de dólares).
La sanción excluye a las selecciones niponas masculina y femenina de competir a nivel internacional; por lo que, a la espera de que se pronuncie ahora la FIBA, ambas podrían quedar fuera de los Juegos de Río de Janeiro de 2016.
