Los campeones defensores, los Heat de Miami, se mantienen en el camino del triunfo gracias a la gran labor individual del alero estrella LeBron James que volvió a Cleveland, donde dio otro recital encestador ante su exequipo de los Cavaliers.
La jornada también dejó a los Hawks de Atlanta con cinco triunfos seguidos, con lo que se afianzan en el octavo y último lugar que da boleto a la competición de la fase final de la Conferencia Este.
James, ante la ausencia del escolta Dwyane Wade, aportó 43 puntos en el triunfo de los Heat, que superaron 96-100 a los Cavaliers y se colocaron con marca de 46-19, líderes de la División Sureste y segundos de la Conferencia Este al conseguir la segunda victoria consecutiva.
La estrella de los Heat, que también lo fue cuando jugó con los Cavaliers, sólo necesitó el primer cuarto para convertirse en el Jugador Más Valioso (MVP) del partido.
James aportó 25 puntos, su mejor marca como profesional en un cuarto, que hizo todo más fácil a los Heat ante un rival que nunca se dio por vencido y luchó hasta el final.
El último ganador del premio MVP de la liga y también de las pasadas Finales de la NBA anotó 14 de 19 tiros de campo, incluidos 6 de 8 triples, y aseguró la victoria con varios tapones espectaculares y tiros de personal.
James aportó también seis rebotes --todos defensivos--, cuatro asistencias, dos recuperaciones de balón y puso tres tapones en los 42 minutos que disputó.
Mientras que el factor sorpresa lo protagonizó el pívot Chris Bosh (al conseguir cinco puntos consecutivos en el cuarto periodo después que los Cavaliers habían puesto el empate en el marcador (83-83).
