Hoy sabemos que cruzó la meta de los 100 metros planos tras detener el cronómetro a los 10 segundos y 261 centécimas. Aquel sueño ha pasado de ser una simple esperanza a algo tangible, algo que cuelga ya de su pecho. Honduras presume de su hazaña y él ya tiene su medalla y es de oro.
Cruz Rolando Palacios Castillo alteró nuestra tranquilidad la tarde del martes, cuando se debió recurrir al 'foto finish' para determinar que había sido él y no el barbadense Levi Cadogan quien asomó primero por la línea de meta de la pista de un estadio medio vacío, inconsciente del logro de aquel joven que consumó allí sus ilusiones y las de un país que quizás con cierta dosis de oportunismo ahora lo venera.
Nació en Sambo Creek, tradicional villa Garífuna ubicada 15 kilómetros al este de La Ceiba, a orillas del Mar Caribe, el 3 de mayo de 1987. Desde ahí, muy joven, se trasladó a Tegucigalpa, a entrenar en la Villa Olímpica.
Al poco tiempo comenzó a despuntar. Con 17 años recién cumplidos compitió en el Campeonato Centroamericano de Atletismo en Nicaragua, donde se colgó la medalla de plata en 200 metros tras registrar una marca de 21:89. Al año siguiente viajó a Helsinki, Finlandia, a competir en el Mundial de la especialidad. Allí, Palacios ocupó el puesto número 38 en los 100 metros entre más de 200 atletas. Su tiempo fue de 10:73.
En fin, que a estas alturas en su palmarés figuran ya, entre pruebas de 100, 200 y relevos 4x400, seis medallas de oro y dos de plata en Juegos Centroamericanos, 17 oros y una plata en Centroamericanos de Atletismo. Así como una medalla de oro en el Campeonato Universitario en Belgrado, Serbia, en 2009 y una plata en los Iberoamericanos de Atletismo en 2010.
SUS ENTRENAMIENTOS CON USAIN BOLT
Toda una vida dedicada al atletismo, deporte que incluso lo llevó a entrenar durante dos años junto al plusmarquista mundial por excelencia, el jamaicano Usain Bolt. 'Entrenar con Bolt no es fácil', llegó a decir.
Lo hacía en el Racers Track Club, también junto a otro prodigio jamaicano del atletismo como Yohan Blake. Pero Palacios desistió ya que su cuerpo 'aguantaba los entrenamientos, pero a veces decaía' porque los jamaicanos 'se daban masajes cuatro veces a la semana y yo uno. Eso no es favorable para formar un deportista de alto nivel en Centroamérica', lamentó.
Palacios acabó sufriendo una severa lesión de pelvis que lo frenó: 'No es fácil, logré bajar mi tiempo a 20:70 en Jamaica, pero yo quería 20:30 o 20:20', indicó antes de regresar a Honduras.
INTERNADO EN REPÚBLICA DOMINICANA
De vuelta en su país retomó la actividad y viajó hace ocho meses a República Dominicana, a entrenar bajo las órdenes de José Ludwin Rubio en un programa de especialización, con el apoyo del Comité Olímpico Hondureño. Y de allá salió con un objetivo en mente: “tengo ganas de reventar la pista”, avisó.
Y en Veracruz lo hizo. Se paró como un gigante en el carril cinco de la pista del Heriberto Jara Corona, donde trazó una ruta tenaz. 'Se lo dedico a mi patria Honduras y a mi familia”, se apresuró a decir el 'Rolo', encaramado en lo más alto del podio, escuchando resonar el Himno Nacional y besando una medalla de oro que bien puede resumir sus sueños.