Sucedió que durante un partido entre Deportivo San Lorenzo y el Batanecos FC, un futbolista simuló haber recibido un impacto con una piedra desde las graderías.
El jugador del Batanecos, Rosbin Ramos, intentó engañar a la cuarteta al fingir que la afición lo había agredido, mientras habían varios jugadores reclamando por una falta.
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Lo cierto e inusual, fue que el juego continuó con normalidad y Ramos no recibió ninguna amonestación por intentar engañar a los árbitros.
Lo que sí ocurrió es que en las redes sociales, tanto en Youtube, Instagram y Facebook, obtuvo miles de reproducciones al viralizarse lo sucedido.
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