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De acuerdo a un informe que el periódico Nuevo Herald publicó este lunes, López, de 31 años, quien el pasado sábado jugó con Cuba ante México, en el segundo partido de la jornada inaugural del torneo de la Concacaf en el Grupo A y que su equipo perdió por 7-0, desapareció después de la concentración antillana.
Pero la delegación oficial de la selección de Cuba, con el entrenador Raul Mederos como máximo responsable, no ha querido hacer ningún comentario al respecto y tampoco si López estará en el partido que Cuba disputará el miércoles frente a Martinica en el Broncos Stadium de Denver.
Si se confirma la baja de López, Cuba perderá a uno de los jugadores más importantes dentro del equipo.
Se conoció además que para el partido contra México, el equipo isleño recibió los uniformes a pocas horas de que comenzara el encuentro que se disputó en el Rose Bowl de Pasadena (California).
López, un originario de la localidad de Morón, provincia de Ciego de Ávila, debutó con la selección de Cuba precisamente en la Copa Oro del 2013 en un partido contra Belice y desde ese momento ha sido un fijo en el combinado nacional de fútbol.
La posible fuga de López mantiene la tradición de convertir a los torneos de la Concacaf en los que participa Cuba como el mejor sistema que tienen los jugadores antillanos para escapar de la isla y quedarse en territorio estadounidense, donde, de inmediato, piden asilo político.
