El delantero del PSG abrió el marcador al minuto 14 del primer tiempo y lo hizo como solo él sabe hacerlo.
Messi recibió en la frontal área y se quitó la marca del defensor boliviano con un hermoso túnel, que lo dejó solo para fulminar, con su educada pierna zurda, la portería de Carlos Lampe.
El futbolista se besó el escudo, la afición en las grederías celebró por todo lo alto su golazo y seguidamente coreó su nombre.
Cabe mencionar que gracias a este tanto, el rosarino igualó a Pelé (77) como el máximo goleador histórico en el fútbol de selecciones sudamericanas. Un récord que llevaba 50 años vigente.