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En los pocos minutos que jugó recibió tres faltas, una especialmente fuerte de Quina. ''Van de cacería a por mí'', llegó a reflexionar el belga a su círculo más íntimo, en declaraciones que recoge el diario AS.
En el seno del Madrid empiezan a ver con preocupación que Hazard sonríe cada vez menos por las constantes faltas que recibe. Esto, evidentemente, puede repercutir negativamente en su recuperación.
Hazard se caracteriza por regatear y marcharse en espacios cortos, es muy frecuente ver que los rivales van al suelo para frenarlo, y el futbolista siente cada una de esas acciones como un riesgo serio para sanarse de su tobillo operado.
Lo cierto es que el belga lucha por ser el fichaje estrella que el Real Madrid hizo hace dos veranos, cuando llegó del Chelsea por 100 millones de euros. Las lesiones no le han permitido desarrollar su juego y, cuando parecía que veía la luz al final del túnel en este tramo final, el juego no lo está acompañando.
Aseguran que Hazard debió fichar por el FC Barcelona
La citada fuente señala que hay parte del vestuario que empieza a pensar que esa dureza en el juego a la que Hazard se ve sometido puede tener algo que ver en las dificultades que está teniendo.
Se fue con molestias ante el Granada
Hazard fue operado del tobillo derecho el 5 de marzo del año pasado en Dallas tras una entrada de su compatriota Meunier. Una cirugía delicada, pues ahí ya tenía implantada una placa de titanio desde junio de 2017.Desde entonces, las lesiones han sido muy frecuentes en el futbolista, hasta el punto de que esta campaña sólo ha podido jugar 20 partidos (en 11 de titular), en los que ha marcado cuatro goles. Al terminar el encuentro ante el Granada se fue cojeando, pero sin mayores peligros.