La decisión se tomó luego de que, sin importar los deseos de la Asociación de Clubes Europeos (ECA) y de la Asociación de Ligas Europeas de Fútbol (EPFL), FIFA anunció, en marzo pasado, que la justa mundialista se llevará a cabo entre el 20 de noviembre y el 18 de diciembre, afectando así los calendarios de competiciones europeas y continentales.
La LFP presentó una apelación contra la decisión de la FIFA ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS). El órgano rector del fútbol busca evitar que el torneo se juegue en el verano de Qatar.
Un Mundial en las últimas semanas del año frenaría la actividad de las principales ligas europeas, ocasionando que se programen más fechas en los meses de verano del hemisferio norte.
El TAS, con sede en Suiza, no ha fijado la fecha para la audiencia. Se trata del primer recurso legal que se radica contra el cambio de fecha del Mundial de Qatar, que se aleja del tradicional periodo entre junio y julio.