Este fenómeno se desencadenó después de registrarse una fulguración solar de clase C el domingo, describió LRAS.
Según estudios de los científicos, la probabilidad de una tormenta magnética para el primer día de marzo era de solamente un 10%, pero la posibilidad de que ocurra la tormenta magnética el día siguiente (2 de marzo) es de un 25 por ciento.
Afectaría la tecnología
Los satélites serían los primeros en verse afectados, lo que desencadenaría problemas en la Tierra con la tecnología que depende de ello, ya que la tormenta puede calentar la atmósfera exterior del planeta, haciendo que se expanda y dificultando que las señales de los satélites lleguen al suelo.Además, una oleada de partículas puede provocar corrientes elevadas en la magnetósfera, lo que puede provocar un voltaje más alto de lo normal en las líneas eléctricas, algo que podría provocar la explosión de transformadores y centrales eléctricas, así como una pérdida de energía.
Tormentas solares
La clasificación de tormentas magnéticas, también llamadas tormentas solares, se divide en cinco niveles: de G1 a G5.Una tormenta G1 puede provocar pequeñas interrupciones en el funcionamiento de los sistemas eléctricos, así como afectar las rutas de migración de aves y animales.
Las tormentas más fuertes (entre G3 y G5) provocan interrupciones en los sistemas de navegación y comunicaciones de onda corta, así como cortes de energía en las redes industriales.
Alerta en Tanzania por la aparición de una extraña enfermedad
Según informa medios internacionales, los vientos solares están golpeando La Tierra a una increíble velocidad de 500 kilómetros por segundo o 1.8 millones de kilómetros por hora.
También se ha abierto una pequeña grieta en el escudo magnético del planeta, una ocurrencia bastante común pero que puede conducir a auroras boreales más brillantes en posiciones tan bajas como Nueva York e Idaho; lugares ubicados a una latitud geomagnética de 55 grados.