'Es una vergüenza para el fútbol que se pierda tanto tiempo en un solo jugador. La pérdida de la vehemencia con la que jugamos el primer tiempo tiene que ver con el arbitraje, fue muy sesgado y los jugadores se cansaron de tanta interrupción. En una jugada demoró 4 minutos', indicó, en rueda de prensa posterior.
Sin mencionar a específicamente a Neymar, pese a la insistencia de los periodistas por aclarar si, como parecía, se refería a él, el técnico colombiano de México aseguró que 'no es un buen ejemplo para el mundo del fútbol'.
Y agregó: 'El fútbol tiene que ser un juego con virilidad, de hombres y no con tanta payasada. Tanta interrupción disminuyó la actitud de quien tenía la iniciativa del juego'.
Solo cuando le preguntaron por el pisotón que recibió Neymar en el minuto 51 y tras el cual el brasileño pidió asistencia médica aseguró que 'fue un contacto muy reducido y cada vez el árbitro interrumpía el partido'.
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