La Selección

¡Se acabó el martirio! México despacha a Honduras de la Copa Oro

La selección de Jorge Luis Pinto se despide sin haber marcado ni un triste gol. La H fue una vergüenza en el torneo.

2017-07-20

Una de las peores versiones de Honduras en la Copa Oro ha llegado a su final. El poco exigente formato de Concacaf y la inocencia de Guayana Francesa nos llevaron a los cuartos de final donde México nos despachó con un solitario gol que más fue un regalo de la defensa catracha.

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La Bicolor de Jorge Luis Pinto fue de las grandes decepciones de la competencia donde nos vamos sin marcar ni un tan solo gol tras disputar cuatro partidos. Terrible y patético.

Honduras tuvo lo que se merece. Su boleto de regreso a casa y nos vamos con desazón, vergüenza y frustración de una competencia que era la crónica de un fracaso anunciado.

Una primera parte con más sombras que luces. Desde la alineación que mandó Pinto parecía sobrevenirse un guión fatal para el desenlace del partido.

Así quedó evidenciado cuando apenas a los tres minutos quedamos desparramados en la primera llegada significativa de México.

Centro pasado que la zaga ni siquiera adivinó por aire, le quedó Orbelín Pineda que astutamente vio como estaba desmarcado Jesús Dueñas que la filtró para que llegara sin dificultades Rodolfo Pizarro para darle la primer cachetada a Honduras.

Foto: Diez

La rigidez acostumbrada de Pinto en la columna vertebral volvía a darle mal resultado. No funcionaba esa famosa línea de cinco que la mayoría se preguntaba cuál era su motivo si debíamos salir a ganar.

La simbiosis Mejía-Acosta daba poca salida en la contención y cada pelota parecía llevar fuego. El caudal de juego asociado tampoco funcionaba en las laterales.

El equipo hondureño no podía hilvanar dos pases y México aprovechaba las limitantes de su rival. A los 14 minutos Buba López volvió a lucirse cuando en un centro de Elías Hernández la mandó al final para que no llegara a cerrar el atacante mexicano Ángel Sepúlveda.

La escuadra de Pinto estaba maniatada y el sofoco del resultado le ponía jugando al filo de la navaja. Pero México se relajaba, estaba ante un conjunto que no generaba ninguna presión, apenas y tocaba la pelota cuando el partido era un monólogo.

A los 32 minutos nuevamente la vimos negra. Disparo soberbio de Orbelín Pineda que detuvo Buba López para salvarnos por enésima ocasión en la Copa Oro.

EL COMPLEMENTO

Honduras salió un poco más intenso en la segunda parte. La imprecisión era endémica en el juego, pero las ganas incrementaron.

Lo mejor era que la posesión del balón nos pertenecía. Pero faltaban los balones filtrados que llegaran al ataque. Se intentó pero no se lograba.

Foto: Diez

A los 49 minutos asustamos con un tiro libre de Romell Quioto que rechazó Jesús Corona pero que no pudo llegar nadie a empujar.

Se notaba que la ansiedad corroía a los jugadores hondureños. Eso fue trasladado a la zaga hondureña cuando a los 50 minutos Henry Figueroa no se entendió con Buba López, despejó pero la pelota le quedó a un rival que afortunadamente no pudo concretar.

La epidemia de la falta de gol continuaba. Estamos enfermos en ataque, ni Quioto, ni Elis, ni Ovidio. Pero Pinto quiso recomponer con el ingreso de Boniek García que hizo el trabajo que faltaba: filtrar pelotas para los atacantes que tampoco aprovechaban así como al 53 lo hizo con Lanza que cuando se encontró frente al arco la disparó contra el arquero.

La más clara del cuadro hondureño fue a los 77 minutos cuando el también recién ingresado Alex López casi se gasta un golazo olímpico que Jesús Corona salvó en la raya de gol.

La última para salvar una catastrófica participación la tuvo Alfredo Mejía que cazó un rezago de Henry Figueroa que la tiró tan mal como la actuación en toda la Copa Oro.

Honduras se regresa con un sabor amargo, sin anotar ningún gol, sin ganar ningún partido (solo uno sobre la mesa) y sin dejar un ápice de convencimiento para la eliminatoria. Recemos para que esto tome otro rumbo.