'Para mí es una ilusión estar aquí. Mi primera experiencia en Primera División y tener ese recibimiento fue algo especial. Algo que nunca voy a olvidar en mi vida. Desde el momento que me dicen que venía para acá, mi chip cambió', comenzó diciendo el futbolista.
Según relata Lozano, una de las cosas que lo motivaron para firmar por el club que está ubicado en el noreste de España, fue su estilo de juego y la pasión con la que sienten el fútbol.
Lozano mientras atendía a los hinchas hondureños el día de su presentación.
Sin embargo, tiene algo claro. Su mirada será mantener los pies sobre el suelo y aprender de los compañeros que ya tienen recorrido. Eso sí, sin desviar la mirada de uno de sus deseos mayores.
'En lo personal quiero aportar lo más que se pueda, obviamente no será fácil tengo mucha competencia y gente de la que quiero aprender porque ya tienen experiencia en la Primera División como Purto, Michael Olunga que ya han hecho goles. Para mí ese un sueño, marcar mi primer gol', confesó Antony.
Antony Lozano posando junto a los directivos del club de Girona.
Además el Choco desveló que no nació en cuna de oro. En su momento solía ver cómo su madre se fagaba para alimentarlos, razón por la que todo ello le ha servido para ser quien es ahora.
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'No tenía muchos recursos, mi madre trabajaba para mantenernos a todos. Mis primeras botas me las regaló un cuñado. Ese recuerdo lo tengo guardado siempre. De momento solo pienso en el presente. Soy una persona que se esfuerza al máximo. Me podrán salir mejor o peor las cosas, pero el sacrificio y la entrega siempre la tendrán de mi parte', concluyó.
A sus 24 años de edad, Lozano posee un palmerés que muy pocos jugadores hondureños tienen. Cinco clubes en España (Alcoyano, Valencia ll, Tenerife, Barcelona B, y ahora Girona). Su mejor versión la mostró en las temporadas 2015-2016 / 2016-2017 con el Tenerife en donde marcó 20 goles.
