FALLECE JUAN CARLOS GARCÍA POR CULPA DE LA LEUCEMIA
Los aldeanos, poco comunicativos y tímidos ante la presencia de las cámaras de Diez, se limitaron a destacar las cualidades suyas como futbolista desde temprana edad.
“Lo conocí desde pequeño, claro, en esta cancha comenzó a jugar”, nos dijo un señor que no quiso brindarnos su nombre ni ahondar en detalles.
A algunas cuadras del primer escenario que presenció sus descolgadas, se encuentra la última casa en que habitó su familia, a la cual con el pasar de los años y los éxitos que le trajo el “deporte rey” brindó más tarde otro día a día.
Aún se juega al fútbol en las calles de la 4 de Enero. Los niños todavía conservan ese espíritu aventurero y deseoso de darse a conocer en algún momento, y por qué no, seguir los pasos del “Oso”, como se le conocía en el argot futbolero.