increíble Lo ganó todo con el Manchester United y ahora podría ir a la cárcel tras ser acusado de pertenecer a una organización criminal
El brasileño Anderson se retiró de los terrenos de juego en 2019 y ahora tiene serios problemas con la justicia.
Se trata de uno de los exjugadores que militó en aquella época dorada del Manchester United con Cristiano Ronaldo y Ferguson al frente.
Anderson Luís de Abreu Oliveira reúne todos los estigmas futbolísticos de lo que pudo ser y no fue. El brasileño fue comparado desde muy joven con Ronaldinho, sin mencionar que comparten el mismo lugar de nacimiento (Porto Alegre), equipo de origen (Gremio) y posición de campo, aunque éste es zurdo.
Anderson maravilló a todos en el Mundial Sub-17 de Perú 2005 que ganó México y en el que fue nombrado Balón de Oro, por delante de Giovani Dos Santos. Apenas tres meses después de terminar el torneo, el Porto se adelantó a todos los clubes de Europa y lo fichó por ocho millones de euros.
Luego de dos temporadas con los ‘Dragones’, donde levantó el título de Liga, Copa y Supercopa, el Manchester United apostó por él en verano de 2007 y pagó más de 30 millones de euros por su traspaso.
Pese a su corta edad, el brasileño disputó 38 encuentros en su primer curso bajo las órdenes de Ferguson, quién guió a una plantilla plagada de estrellas a conseguir un histórico doblete, Premier League y Champions, en 2008. Aquella final de la Copa de Europa se la ganaron al Chelsea desde la tanda de penales.
Anderson disputó seis temporadas con el Manchester United y ahí compartió dos años con Cristiano Ronaldo antes que el portugués se marchara al Real Madrid. El volante comenzó a diluirse y fue enero del 2014 cuando el club lo envió cedido a la Fiorentina.
Con el conjunto italiano, ‘Andow’ fue intrascendente y volvió al United a final de temporada. Ahí se topó con un Louis van Gaal que lo mandó a la filial un par de partidos antes de desvincularse definitivamente de la entidad inglesa en febrero de 2015.
Con una Champions, cuatro Premier, un Mundial de Clubes, dos FA Cup y dos Community Shield, pero con la sensación de que jamás llegó a cumplir con las expectativas puestas en él, Anderson regresó a Brasil para jugar con el Internacional, club del que forma parte de su historia negra.
En su segunda de sus dos campañas con el Inter, Anderson fue uno de los integrantes del plantel que descendió a la Serie B por primera vez en la historia del equipo. Tras dicho fiasco, el brasileño se quedó por varios meses sin encontrar equipo.
Fue el Adana Demirspor, club que militaba en la Segunda División de Turquía, quien le dio la oportunidad de retomar su carrera hasta que decidió colgar los botines en 2019 a la temprana edad de 31 años.
Tras haber anunciado su retiro, Anderson comenzó a disfrutar de sus días libres, lejos de los entrenamientos, y presumía su estilo de vida en tierras turcas por medio de las redes sociales. Luego se volvió a Portugal.
Sin embargo, el destino del exfutbolista dio un giro de 360 grados en 2021. El que fuera nueve veces internacional con la selección de Brasil fue acusado de pertenecer a una organización criminal.
Anderson afronta una pena de prisión de diez años si es encontrado culpable de formar parte de una organización criminal que se dedica al robo, al fraude y al lavado de dinero.
Según la investigación, el exjugador habría desfalcado cerca de cinco millones de euros a Gerdau, un fabricante de acero de Porto Alegre, desviando ese dinero ilegalmente y lavándolo mediante la compra de criptomonedas.
El apartamento de Anderson en Porto Alegre ya fue registrado por la policía el año pasado y su ordenador fue incautado. El brasileño confirmó que intercambia criptomonedas, pero niega cualquier otro tipo de acusación.
‘‘Se está llevando a cabo una investigación y Anderson lo sabe, pero va a demostrar que es una víctima y no un agresor”, dijo a Globo el abogado del brasileño, Julio Cezar Coitinho Junior.
En caso de ser declarado culpable, Anderson, que lo ganó todo con el Manchester United, sería extraditado a Brasil y se enfrentaría a una pena de diez años de cárcel.
El brasileño lo tenía todo para conquistar el mundo, pero su talento se fue apagando y ahora está en serios problemas con la justicia.
2022/05/0917:25H. / Billy Vásquez Premier LeagueCárcelLavado de dineroCristiano RonaldoManchester unitedBVASQUEZ
Se trata de uno de los exjugadores que militó en aquella época dorada del Manchester United con Cristiano Ronaldo y Ferguson al frente.
Anderson Luís de Abreu Oliveira reúne todos los estigmas futbolísticos de lo que pudo ser y no fue. El brasileño fue comparado desde muy joven con Ronaldinho, sin mencionar que comparten el mismo lugar de nacimiento (Porto Alegre), equipo de origen (Gremio) y posición de campo, aunque éste es zurdo.
Anderson maravilló a todos en el Mundial Sub-17 de Perú 2005 que ganó México y en el que fue nombrado Balón de Oro, por delante de Giovani Dos Santos. Apenas tres meses después de terminar el torneo, el Porto se adelantó a todos los clubes de Europa y lo fichó por ocho millones de euros.
Luego de dos temporadas con los ‘Dragones’, donde levantó el título de Liga, Copa y Supercopa, el Manchester United apostó por él en verano de 2007 y pagó más de 30 millones de euros por su traspaso.
Pese a su corta edad, el brasileño disputó 38 encuentros en su primer curso bajo las órdenes de Ferguson, quién guió a una plantilla plagada de estrellas a conseguir un histórico doblete, Premier League y Champions, en 2008. Aquella final de la Copa de Europa se la ganaron al Chelsea desde la tanda de penales.
Anderson disputó seis temporadas con el Manchester United y ahí compartió dos años con Cristiano Ronaldo antes que el portugués se marchara al Real Madrid. El volante comenzó a diluirse y fue enero del 2014 cuando el club lo envió cedido a la Fiorentina.
Con el conjunto italiano, ‘Andow’ fue intrascendente y volvió al United a final de temporada. Ahí se topó con un Louis van Gaal que lo mandó a la filial un par de partidos antes de desvincularse definitivamente de la entidad inglesa en febrero de 2015.
Con una Champions, cuatro Premier, un Mundial de Clubes, dos FA Cup y dos Community Shield, pero con la sensación de que jamás llegó a cumplir con las expectativas puestas en él, Anderson regresó a Brasil para jugar con el Internacional, club del que forma parte de su historia negra.
En su segunda de sus dos campañas con el Inter, Anderson fue uno de los integrantes del plantel que descendió a la Serie B por primera vez en la historia del equipo. Tras dicho fiasco, el brasileño se quedó por varios meses sin encontrar equipo.
Fue el Adana Demirspor, club que militaba en la Segunda División de Turquía, quien le dio la oportunidad de retomar su carrera hasta que decidió colgar los botines en 2019 a la temprana edad de 31 años.
Tras haber anunciado su retiro, Anderson comenzó a disfrutar de sus días libres, lejos de los entrenamientos, y presumía su estilo de vida en tierras turcas por medio de las redes sociales. Luego se volvió a Portugal.
Sin embargo, el destino del exfutbolista dio un giro de 360 grados en 2021. El que fuera nueve veces internacional con la selección de Brasil fue acusado de pertenecer a una organización criminal.
Anderson afronta una pena de prisión de diez años si es encontrado culpable de formar parte de una organización criminal que se dedica al robo, al fraude y al lavado de dinero.
Según la investigación, el exjugador habría desfalcado cerca de cinco millones de euros a Gerdau, un fabricante de acero de Porto Alegre, desviando ese dinero ilegalmente y lavándolo mediante la compra de criptomonedas.
El apartamento de Anderson en Porto Alegre ya fue registrado por la policía el año pasado y su ordenador fue incautado. El brasileño confirmó que intercambia criptomonedas, pero niega cualquier otro tipo de acusación.
‘‘Se está llevando a cabo una investigación y Anderson lo sabe, pero va a demostrar que es una víctima y no un agresor”, dijo a Globo el abogado del brasileño, Julio Cezar Coitinho Junior.
En caso de ser declarado culpable, Anderson, que lo ganó todo con el Manchester United, sería extraditado a Brasil y se enfrentaría a una pena de diez años de cárcel.
El brasileño lo tenía todo para conquistar el mundo, pero su talento se fue apagando y ahora está en serios problemas con la justicia.